Un curso de milagros 41-60
UN CURSO DE MILAGROS APLICADO A LA CODEPENDENCIA
LECCIÓN 41 UCDM
Dios va conmigo dondequiera que yo voy.
1. Con el tiempo, la idea de hoy desvanecerá por completo la sensación de soledad y abandono que
experimentan todos los que se consideran separados. 2La depresión es una consecuencia inevitable de la
separación, 3
como también lo son la ansiedad, las preocupaciones, una profunda sensación de
desamparo, la infelicidad, el sufrimiento y el intenso miedo a perder.
2. Los que se consideran separados han inventado muchos "remedios" para lo que, según ellos, son "los
males del mundo": 2Pero la única cosa que no han hecho es cuestionar la realidad del problema. 3Los
29
efectos de éste, no obstante, no se pueden sanar porque el problema no es real. 4La idea de hoy tiene el
poder de acabar con todo este desatino para siempre. 5Pues eso es lo que es, un desatino, por muy serias
y trágicas que parezcan ser sus manifestaciones.
3. En lo profundo de tu interior yace todo lo que es perfecto, presto a irradiar a través de ti sobre el
mundo. 2Ello sanará todo pesar y dolor, todo temor y toda sensación de pérdida porque curará a la mente
que pensaba que todas esas cosas eran reales y que sufría debido a la lealtad que les tenía.
4. jamás se te puede privar de tu perfecta santidad porque su Fuente va contigo dondequiera que tú vas.
2
jamás puedes sufrir porque la Fuente de toda dicha va contigo dondequiera que tú vas. 3
jamás puedes
estar solo porque la Fuente de toda vida va contigo dondequiera que tú vas. 4Nada puede destruir tu paz
mental porque Dios va contigo dondequiera que tú vas.
5. Comprendemos que no creas nada de esto. 2¿Cómo ibas a creerlo cuando la verdad se halla oculta en
lo profundo de tu interior, bajo una pesada nube de pensamientos dementes, densos y turbios que
representan, no obstante, todo lo que ves? 3Hoy intentaremos por primera vez atravesar esa oscura y
pesada nube y llegar a la luz que se encuentra más allá.
6. Hoy tendremos una sola sesión de práctica larga. 2Por la mañana, a ser posible tan pronto como te
levantes, siéntate en silencio de tres a cinco minutos con los ojos cerrados. 3Al comienzo de la sesión de
práctica repite la idea de hoy muy lentamente. 4No trates de pensar en nada en particular. 5Trata, en
cambio, de experimentar la sensación de que estás sumergiéndote en tu interior, más allá de todos los
pensamientos vanos del mundo. 6Trata de llegar hasta lo más profundo de tu mente, manteniéndola
despejada de cualquier pensamiento que pudiese distraerte.
7. De vez en cuando puedes repetir la idea de hoy si observas que eso te ayuda. 2Pero sobre todo, trata
de sumergirte tan profundamente como puedas en tu interior, lejos del mundo y de todos sus
pensamientos disparatados. 3Estás tratando de llegar más allá de todo. ello. 4Estás tratando de dejar atrás
las apariencias y de aproximarte a la realidad.
8. Es perfectamente posible llegar a Dios. 2De hecho, es muy fácil, ya que es la cosa más natural del
mundo. 3Podría decirse incluso que es lo único que es natural en el mundo. 4El camino quedará
despejado, si realmente crees que ello es posible. 5Este ejercicio puede producir resultados asombrosos
incluso la primera vez que se intenta, y tarde o temprano acaba por tener éxito. 6A medida que avancemos
ofreceremos más detalles acerca de este tipo de práctica. 7No obstante, nunca fracasa del todo, y es
posible tener éxito inmediatamente.
9. Usa la idea frecuentemente a lo largo del día, repitiéndola muy despacio, preferiblemente con los ojos
cerrados. 2Piensa en lo que estás diciendo, en el significado de las palabras. 3Concéntrate en la santidad
que esas palabras te atribuyen, en la compañía indefectible de la que gozas, en la completa protección
que te rodea.
10. Puedes ciertamente permitirte el lujo de reírte de los pensamientos de miedo, recordando que Dios va
contigo dondequiera que tú vas.
VIDEO
LECCIÓN 42 UCDM
Dios es mi fortaleza. La visión es Su regalo.
1. La idea de hoy combina dos pensamientos muy poderosos, ambos de gran importancia. 2Plantea
también una relación de causa y efecto que explica por qué tus esfuerzos por alcanzar la meta del curso
no pueden ser en vano. 3Verás, porque ésa es la Voluntad de Dios. 4Es Su fortaleza, no la tuya, la que te
da poder. 5Y es Su regalo, no el tuyo, el que te ofrece visión.
2. Dios es ciertamente tu fortaleza, y lo que Él da, es verdaderamente dado. 2Esto quiere decir que lo
puedes recibir en cualquier momento o lugar, donde quiera que estés y en cualquier circuns tancia en la
que te encuentres. 3Tu paso por el tiempo y por el espacio no es al azar. 4No puedes sino estar en el lugar
perfecto, en el momento perfecto. 5Tal es la fortaleza de Dios. 6Tales Sus dones.
3. Hoy llevaremos a cabo dos sesiones de práctica de tres a cinco minutos cada una; una tan pronto como
te despiertes, y la otra, lo más cerca posible de la hora de irte a dormir. 2Es mejor, no obstante, esperar
hasta que puedas sentarte tranquilamente por tu cuenta en un momento en que te sientas listo, que
preocuparte de la hora en sí.
4. Da comienzo a estas sesiones de práctica repitiendo la idea de hoy lentamente mientras miras a tu
alrededor. 2Luego cierra los ojos y repite la idea otra vez, aún más despacio que antes. 3Después de eso,
trata de no pensar en nada, excepto en los pensamientos que se te ocurran relacionados con la idea de
hoy. 4Puedes pensar, por ejemplo:
5La visión tiene que ser posible. 6Dios da verdaderamente,
o:
7Los regalos que Dios me ha hecho tienen que ser míos porque Él me los dio.
5. Cualquier pensamiento que esté claramente relacionado con la idea de hoy es adecuado. 2De hecho, tal
vez te asombre la cantidad de entendimiento relacionado con el curso que algunos de tus pensamientos
reflejan. 3Déjalos que te vengan sin censurarlos, a menos que notes que tu mente está simplemente
divagando y que es obvio que has permitido que se infiltren pensamientos irrelevantes. 4Es posible
30
también que llegue un punto en el que parece que no te van a venir más pensamientos a la mente. 5De
ocurrir tales interferencias, abre los ojos y repite el pensamiento una vez más mientras miras lentamente a
tu alrededor; después ciérralos, repite la idea otra vez, y continúa buscando en tu mente pensamientos
afines.
6. Recuerda, no obstante, que en conexión con los ejercicios de hoy no es apropiado que te esfuerces por
encontrar pensamientos afines. 2Trata sencillamente de hacerte a un lado y dejar que te vengan a la mente
por su cuenta. 3Si esto te resulta difícil, es mejor pasar la sesión de práctica alternando entre repeticiones
lentas de la idea con los ojos abiertos y luego con los ojos cerrados, que esforzarte por encontrar
pensamientos adecuados.
7. No hay límite en el número de sesiones de práctica cortas que podrían resultarte beneficiosas hoy. 2La
idea de hoy es uno de los pasos iniciales en el proceso de unificar tus pensamientos y de enseñarte que
estás estudiando un sistema de pensamiento unificado que no carece de nada que sea necesario, y en el
que no se incluye nada contradictorio o irrelevante.
8. Cuanto más a menudo repitas la idea de hoy durante el transcurso del día, más a menudo estarás
recordando que el objetivo del curso es importante para ti y que no lo has olvidado.
VIDEO
LECCIÓN 43 UCDM
Dios es mi Fuente. No puedo ver separado de Él.
1. La percepción no es un atributo de Dios. 2El ámbito de Dios es el del conocimiento. 3Sin embargo, Él ha
creado al Espíritu Santo para que sirva de Mediador entre la percepción y el conocimiento. 4Sin este
vínculo con Dios, la percepción habría reemplazado al conocimiento en tu mente para siempre. 5Gracias a
este vínculo con Dios, la percepción se transformará y se purificará en tal medida que te conducirá al
conocimiento. 6Ésa es su función tal como la ve el Espíritu Santo. 7Por lo tanto, ésa es en verdad su
función.
2. En Dios no puedes ver. 2La percepción no tiene ninguna función en Dios, y no existe. 3Pero en la
salvación, que es el proceso de erradicar lo que nunca fue, la percepción tiene un propósito sumamente
importante. 4Habiéndola inventado el Hijo de Dios para un propósito no santo, tiene que convertirse ahora
en el medio a través del cual se le restaura su santidad en su conciencia. 5La percepción no tiene
significado. 6Sin embargo, el Espíritu Santo le otorga un significado muy parecido al de Dios. 7Una
percepción que ha sanado se convierte en el medio por el que el Hijo de Dios perdona a su hermano, y,
por ende, se perdona a sí mismo.
3. No puedes ver separado de Dios porque no puedes estar separado de Dios. 2Todo lo que haces, lo
haces en Él, porque todo lo que piensas, lo piensas con Su Mente. 3Si la visión es real, y es real en la
medida en que comparte el propósito del Espíritu Santo, entonces no puedes ver separado de Dios.
4. Hoy son necesarias tres sesiones de práctica de cinco minutos cada una. 2La primera debe hacerse lo
más temprano que puedas; la segunda lo más tarde posible, y la tercera en el momento más oportuno y
adecuado que las circunstancias y la buena disposición permitan. 3Al comienzo de estas sesiones repite la
idea de hoy para tus adentros con los ojos cerrados. 4Luego mira a tú alrededor brevemente, aplicando la
idea específicamente a lo que veas. 5Cuatro o cinco objetos durante esta fase de la sesión de práctica
serán suficientes. 6Podrías decir, por ejemplo:
7Dios es mi Fuente. 8No puedo ver este escritorio separado de Él.
9Dios es mi Fuente. 10No puedo ver ese cuadro separado de Él.
5. Si bien esta parte del ejercicio debe ser relativamente corta, asegúrate, en esta fase de la práctica, de
seleccionar los objetos tan al azar como sea posible, sin controlar su inclusión o exclusión. 2Para la segunda
fase, la más larga, cierra los ojos, repite la idea de hoy nuevamente, y luego deja que cualquier pensamiento
pertinente que se te ocurra sea una aportación a la idea de hoy en tu propio estilo particular. 3Pensamientos
tales como:
4Veo a través de los ojos del perdón.
5Veo el mundo como un lugar bendito.
6El mundo me puede mostrar quién soy.
7Veo mis propios pensamientos, que son como los de Dios.
8Cualquier pensamiento que en mayor o menor medida esté directamente relacionado con la idea de hoy es
adecuado. 9Los pensamientos no tienen que tener una relación obvia con la idea, pero tampoco deben
oponerse a ella.
6. Si ves que tu mente se distrae o si comienzas a notar la presencia de pensamientos que están en clara
oposición a la idea de hoy, o si te resulta imposible pensar en algo, abre los ojos, repite la primera fase del
ejercicio, y luego intenta de nuevo la segunda. 2No dejes transcurrir grandes lapsos de tiempo en los que te
enfrascas en pensamientos irrelevantes. 3Para evitar eso, vuelve a la primera fase del ejercicio cuantas
veces sea necesario.
31
7. Al aplicar la idea de hoy durante las sesiones de práctica más cortas, la forma de la idea puede variar de
acuerdo con las circunstancias y situaciones en las que te encuentres en el transcurso del día. 2 Cuando
estés con otra persona, por ejemplo, trata de acordarte de decirle silenciosamente:
3Dios es mi Fuente. 4No puedo verte separado de Él.
5Esta variación puede aplicarse por igual tanto a desconocidos como a aquellas personas con las que crees
tener una relación íntima. 6De hecho, evita a toda costa hacer distinciones de esta clase.
8. La idea de hoy también debe aplicarse en el transcurso del día a las diversas situaciones y
acontecimientos que puedan presentarse, especialmente a aquellos que de alguna forma parezcan afligirte.
2A tal fin, aplica la idea de esta manera:
3Dios es mi Fuente. 4No puedo ver esto separado de Él.
9. Si en ese momento no se presenta en tu conciencia ningún sujeto en particular, repite simplemente la idea
en su forma original. 2Trata de no dejar pasar grandes lapsos de tiempo sin recordar la idea de hoy y, por
ende, sin recordar tu función.
VIDEO
LECCIÓN 44 UCDM
Dios es la luz en la que veo.
1. Hoy continuamos con la idea de ayer, agregándole otra dimensión. 2No puedes ver en la oscuridad, y no
puedes fabricar luz. 3Puedes fabricar oscuridad y luego pensar que ves en ella, pero la luz refleja vida, y
es, por lo tanto, un aspecto de la creación. 4La creación y la oscuridad no pueden coexistir, pero la luz y la
vida son inseparables, pues no son sino diferentes aspectos de la creación.
2. Para poder ver, tienes que reconocer que la luz se encuentra en tu interior y no afuera. 2No puedes ver
fuera de ti, ni tampoco se encuentra fuera de ti el equipo que necesitas para poder ver. 3Una parte esencial
de ese equipo es la luz que hace posible el que puedas ver. 4Esa luz está siempre contigo, haciendo que
la visión sea posible en toda circunstancia.
3. Hoy vamos a intentar llegar hasta esa luz. 2Para tal fin, utilizaremos una forma de ejercicio que ya se
sugirió anteriormente, y que vamos a utilizar cada vez más. 3Dicha forma de ejercicio es especialmente
difícil para la mente indisciplinada y representa uno de los objetivos principales del entrenamiento mental.
4Requiere precisamente lo que le falta a la mente sin entrenar. 5Con todo, si has de ver, dicho
entrenamiento tiene que tener lugar.
4. Lleva a cabo como mínimo tres sesiones de práctica hoy, cada una de tres a cinco minutos de duración.
2Recomendamos enfáticamente que les dediques más tiempo, pero únicamente si notas que el tiempo
pasa sin que experimentes ninguna sensación de tensión o muy poca. 3La forma de práctica que vamos a
utilizar hoy es la más natural y fácil del mundo para la mente entrenada, tal como parece ser la más
antinatural y difícil para la mente sin entrenar.
5. Tu mente ya no está completamente sin entrenar. 2Estás bastante listo para aprender la forma de
ejercicio que vamos a utilizar hoy, pero es posible que te topes con una gran resistencia. 3La razón es muy
simple. 4Al practicar de esta manera, te desprendes de todo lo que ahora crees y de todos los
pensamientos que has inventado. 5Propiamente dicho, esto constituye tu liberación del infierno. 6Sin
embargo, si se percibe a través de los ojos del ego, es una pérdida de identidad y un descenso al infierno.
6. Si te puedes apartar del ego, aunque sólo sea un poco, no tendrás dificultad alguna en reconocer que
su oposición y sus miedos no significan nada. 2Tal vez te resulte útil recordarte a ti mismo de vez en
cuando, que alcanzar la luz es escapar de la oscuridad, independientemente de lo que creas al contrario.
3Dios es la luz en la que ves. 4Estás intentando llegar a Él.
7. Da comienzo a la sesión de práctica repitiendo la idea de hoy con los ojos abiertos, luego ciérralos
lentamente mientras repites la idea varias veces más. 2Trata entonces de sumergirte en tu mente,
abandonando cualquier clase de interferencia e intrusión a medida que te sumerges serenamente más allá
de ellas. 3No hay nada, excepto tú, que pueda impedirle a tu mente hacer esto. 4Tu mente está
sencillamente siguiendo su curso natural. 5Trata de observar los pensamientos que te vengan sin
involucrarte con ninguno de ellos, y pásalos de largo tranquilamente.
8. Si bien no se recomienda ningún enfoque en particular para esta forma de ejercicio, sí es necesario que
te des cuenta de cuán importante es lo que estás haciendo, el inestimable valor que ello tiene para ti, así
como que seas consciente de que estás intentando hacer algo muy sagrado. 2La salvación es el más feliz
de todos tus logros. 3Es asimismo el único que tiene sentido porque es el único que tiene verdadera
utilidad para ti.
9. Si experimentas cualquier clase de resistencia, haz una pausa lo suficientemente larga como para poder
repetir la idea de hoy con los ojos cerrados, a no ser que notes que tienes miedo. 2En ese caso es
probable que abrir los ojos brevemente te haga sentir más tranquilo. 3Trata, sin embargo, de reanudar los
ejercicios con los ojos cerrados tan pronto como puedas.
10. Si estás haciendo los ejercicios correctamente, deberías experimentar una cierta sensación de
relajación, e incluso sentir que te estás aproximando a la luz o de hecho adentrándote en ella. 2Trata de
32
pensar en la luz, sin forma y sin límites, según pasas de largo los pensamientos de este mundo. 3Y no te
olvides de que no te pueden atar a él a no ser que tú les des el poder de hacerlo.
11. Durante el transcurso del día, repite la idea a menudo con los ojos abiertos o cerrados, como mejor te
parezca en su momento. 2Pero no te olvides de repetirla. 3Sobre todo, decídete hoy a no olvidarte.
VIDEO
LECCIÓN 45 UCDM
Dios es la Mente con la que pienso.
1. La idea de hoy es la llave que te dará acceso a tus pensamientos reales, 2
los cuales no tienen nada que
ver con lo que piensas que piensas, de la misma manera en que nada de lo que piensas que ves guarda
relación alguna con la visión. 3No existe ninguna relación entre lo que es real y lo que tú piensas que es
real. 4Ni uno solo de los que según tú son tus pensamientos reales se parece en modo alguno a tus
pensamientos reales. 5Nada de lo que piensas que ves guarda semejanza alguna con lo que la visión te
mostrará.
2. Piensas con la Mente de Dios. 2Por lo tanto, compartes tus pensamientos con Él, de la misma forma en
que Él comparte los Suyos contigo. 3Son los mismos pensamientos porque los piensa la misma Mente.
4Compartir es hacer de manera semejante o hacer lo mismo. 5Los pensamientos que piensas con la Mente
de Dios no abandonan tu mente porque los pensamientos no abandonan su fuente. 6Por consiguiente, tus
pensamientos están en la Mente de Dios, al igual que tú. 7Están en tu mente también, donde Él está. 8Tal
como tú eres parte de Su Mente, así también tus pensamientos son parte de Su Mente.
3. ¿Dónde están, pues, tus pensamientos reales? 2Hoy intentaremos llegar a ellos. 3Tendremos que
buscarlos en tu mente porque ahí es donde se encuentran. 4Aún tienen que estar ahí, ya que no pueden
haber abandonado su fuente. 5Lo que la Mente de Dios ha pensado es eterno, al ser parte de la creación.
4. Nuestras tres sesiones de práctica de hoy, de cinco minutos cada una, seguirán el mismo modelo
general que usamos al aplicar la idea de ayer. 2
Intentaremos abandonar lo irreal y buscar lo real.
3Negaremos el mundo en favor de la verdad. 4No permitiremos que los pensamientos del mundo nos
detengan. 5No dejaremos que las creencias del mundo nos digan que lo que Dios quiere que hagamos es
imposible. 6En lugar de ello, trataremos de reconocer que sólo aquello que Dios quiere que hagamos es
posible.
5. Trataremos asimismo de comprender que sólo lo que Dios quiere que hagamos es lo que nosotros
queremos hacer. 2Y también trataremos de recordar que no podemos fracasar al hacer lo que Él quiere
que hagamos. 3Tenemos hoy todas las razones del mundo para sentirnos seguros de que vamos a triunfar,
4pues ésa es la Voluntad de Dios.
6. Comienza los ejercicios de hoy repitiendo la idea para tus adentros, al mismo tiempo que cierras los
ojos. 2Luego dedica unos cuantos minutos a pensar en ideas afines que procedan de ti, mientras
mantienes la idea presente en tu mente. 3Una vez que hayas añadido cuatro o cinco de tus pensamientos
a la idea, repite ésta otra vez mientras te dices a ti mismo suavemente:
4Mis pensamientos reales están en mi mente.
5Me gustaría encontrarlos.
6Trata luego de ir más allá de todos los pensamientos irreales que cubren la verdad en tu mente y de llegar
a lo eterno.
7. Debajo de todos los pensamientos insensatos e ideas descabelladas con las que has abarrotado tu
mente, se encuentran los pensamientos que pensaste con Dios en el principio. 2Están ahí en tu mente,
ahora mismo, completamente inalterados. 3Siempre estarán en tu mente, tal como siempre lo han estado.
4Todo lo que has pensado desde entonces cambiará, pero los cimientos sobre los que eso descansa son
absolutamente inmutables.
8. Hacia esos cimientos es adonde los ejercicios de hoy apuntan. 2Ahí es donde tu mente está unida a la
Mente de Dios. 3Ahí es donde tus pensamientos son uno con los Suyos. 4Para este tipo de práctica sólo se
necesita una cosa: que tu actitud hacia ella sea la misma que tendrías ante un altar consagrado en el Cielo
a Dios el Padre y a Dios el Hijo. 5Pues tal es el lugar al que estás intentando llegar. 6Probablemente no
puedes darte cuenta todavía de cuán alto estás intentando elevarte. 7Sin embargo, aun con el poco
entendimiento que has adquirido hasta la fecha, deberías ser capaz de recordarte a ti mismo que esto no
es un juego fútil, sino un ejercicio de santidad y un intento de alcanzar el Reino de los Cielos.
9. En las sesiones de práctica cortas de hoy, trata de recordar cuán importante es para ti comprender la
santidad de la mente que piensa con Dios. 2Mientras repites la idea a lo largo del día, dedica uno o dos
minutos a apreciar la santidad de tu mente. 3Deja a un lado, aunque sea brevemente, todos los
pensamientos que son indignos de Aquel de Quien eres anfitrión. 4Y dale gracias por los pensamientos
que Él está pensando contigo.
VIDEO
LECCIÓN 46 UCDM
Dios es el Amor en el que perdono.
1. Dios no perdona porque nunca ha condenado. 2Y primero tiene que haber condenación para que el perdón
sea necesario. 3El perdón es la mayor necesidad de este mundo, y esto se debe a que es un mundo de
33
ilusiones. 4Aquellos que perdonan se liberan a sí mismos de las ilusiones, mientras que los que se ruegan a
hacerlo se atan a ellas. 5De la misma manera en que sólo te condenas a ti mismo, de igual modo, sólo te
perdonas a ti mismo.
2. Pero si bien Dios no perdona, Su Amor es, no obstante, la base del perdón. 2El miedo condena y el amor
perdona. 3El perdón, pues, des-hace lo que el miedo ha producido, y lleva de nuevo a la mente a la
conciencia de Dios. 4Por esta razón, al perdón puede llamársele verdaderamente salvación. 5Es el medio a
través del cual desaparecen las ilusiones.
3. Los ejercicios de hoy requieren por lo menos tres sesiones de práctica de cinco minutos completos, y el
mayor número posible de las más cortas. 2Como de costumbre, comienza las sesiones de práctica más
largas repitiendo la idea de hoy para tus adentros. 3Cierra los ojos mientras lo haces, y dedica un minuto o
dos a explorar tu mente en busca de aquellas personas a quienes no has perdonado. 4No importa en qué
medida no las hayas perdonado. 5O las has perdonado completamente o no las has perdonado en absoluto.
4. Si estás haciendo los ejercicios correctamente no deberías tener ninguna dificultad en encontrar un buen
número de personas a quienes no has perdonado. 2En general, se puede asumir correctamente que
cualquier persona que no te caiga bien es un sujeto adecuado. 3Menciona cada una de ellas por su nombre,
y di:
4
[Nombre], Dios es el Amor en el que te perdono.
5. El propósito de la primera fase de las sesiones de práctica de hoy es colocarte en una posición desde la
que puedes perdonarte a ti mismo. 2Después que hayas aplicado la idea a todas las personas que te hayan
venido a la mente, di para tus adentros:
3Dios es el Amor en el que me perdono a mí mismo.
4Dedica luego el resto de la sesión a añadir ideas afines tales como:
5Dios es el Amor con el que me amo a mí mismo.
6Dios es el Amor en el que me alzo bendecido.
6. El modelo a seguir en cada aplicación puede variar considerablemente, pero no se debe perder de vista la
idea central. 2Podrías decir, por ejemplo:
3No puedo ser culpable porque soy un Hijo de Dios.
4Ya he sido perdonado.
5El miedo no tiene cabida en una mente que Dios ama.
6No tengo necesidad de atacar porque el amor me ha perdonado.
7La sesión de práctica debe terminar, no obstante, con una repetición de la idea de hoy en su forma original.
7. Las sesiones de práctica más cortas pueden consistir ya sea en una repetición de la idea de hoy en su
forma original, o en una afín, según prefieras. 2Asegúrate, no obstante, de aplicar la idea de manera más
concreta si surge la necesidad. 3Esto será necesario en cualquier momento del día en el que te percates de
cualquier reacción negativa hacia alguien, tanto si esa persona está presente como si no. 4En tal caso, dile
silenciosamente:
5Dios es el Amor en el que te perdono.
VIDEO
LECCIÓN 47 UCDM
Dios es la fortaleza en la que confío.
1. Si sólo confías en tus propias fuerzas, tienes todas las razones del mundo para sentirte aprensivo,
ansioso y atemorizado. 2¿Qué puedes predecir o controlar? 3¿Qué hay en ti con lo que puedas contar?
4¿Qué te podría capacitar para ser consciente de todas las facetas de un problema, y de resolverlos de tal
manera que de ello sólo resultase lo bueno? 5¿Qué hay en ti que te permita poder reconocer la solución
correcta, y garantizar su consecución?
2. Por ti mismo no puedes hacer ninguna de esas cosas. 2Creer que puedes es poner tu confianza en algo
que no es digno de ella, y justificar el miedo, la ansiedad, la depresión, la ira y el pesar. 3¿Quién puede
depositar su fe en la debilidad y sentirse seguro? 4Por otra parte, ¿quién puede depositar su fe en la
fortaleza y sentirse débil?
3. Dios es tu seguridad en toda circunstancia. 2Su Voz habla por Él en toda situación y en todos los
aspectos de cada situación, diciéndote exactamente qué es lo que tienes que hacer para invocar Su
fortaleza y Su protección. 3En esto no hay excepciones porque en Dios no hay excepciones. 4Y la Voz que
habla por Él piensa como Él.
4. Hoy trataremos de llegar más allá de tu debilidad hasta la Fuente de la verdadera fortaleza. 2Son
necesarias hoy cuatro sesiones de práctica de cinco minutos cada una, aunque se te exhorta a que hagas
más y a que les dediques más tiempo. 3Cierra los ojos y comienza como de costumbre repitiendo la idea
de hoy. 4Luego dedica un minuto o dos a buscar situaciones en tu vida que hayas revestido de temor, y
desecha cada una de ellas diciéndote a ti mismo:
34
5Dios es la fortaleza en la que confío.
5. Trata ahora de deslizarte más allá de todas las preocupaciones relacionadas con tu propia sensación de
insuficiencia. 2Es obvio que cualquier situación que te causa inquietud está asociada con sentimientos de
insuficiencia, pues, de lo contrario, creerías que puedes lidiar con la situación con éxito. 3Confiando en ti
mismo no es la manera de adquirir confianza. 4Mas la fortaleza de Dios en ti tiene éxito en todo.
6. Reconocer tu propia debilidad es un paso necesario para la corrección de tus errores, pero no es
suficiente para darte la confianza que necesitas, y a la que tienes derecho. 2Debes adquirir asimismo la
conciencia de que confiar en tu verdadera fortaleza está plenamente justificado en relación con todo y en
toda circunstancia.
7. En la última fase de cada sesión de práctica, trata de llegar muy hondo dentro de tu mente a un lugar de
verdadera seguridad. 2Reconocerás que has llegado cuando sientas una profunda sensación de paz, por
muy breve que sea. 3Despréndete de todas las trivialidades que bullen y burbujean en la superficie de tu
mente, y sumérgete por debajo de ellas hasta llegar al Reino de los Cielos. 4Hay un lugar en ti donde hay
perfecta paz. 5Hay un lugar en ti en el que nada es imposible. 6Hay un lugar en ti donde mora la fortaleza
de Dios.
8. Repite la idea frecuentemente en el transcurso del día. 2Úsala como respuesta a cualquier cosa que te
perturbe. 3Recuerda que tienes derecho a la paz porque estás depositando tu confianza en la fortaleza de
Dios.
VIDEO
LECCIÓN 48 UCDM
No hay nada que temer.
1. La idea de hoy afirma simplemente un hecho. 2No es un hecho para los que creen en ilusiones, mas las
ilusiones no son hechos. 3En realidad no hay nada que temer. 4Esto es algo muy fácil de reconocer. 5Pero
a los que quieren que las ilusiones sean verdad les es muy difícil reconocerlo.
2. Las sesiones de práctica de hoy serán muy cortas, muy simples y muy frecuentes. 2Repite sencillamente
la idea tan a menudo como puedas. 3Puedes hacerlo con los ojos abiertos en cualquier momento o
situación. 4Recomendamos enérgicamente, no obstante, que siempre que puedas cierres los ojos durante
aproximadamente un minuto y repitas la idea lentamente para tus adentros varias veces. 5Es
especialmente importante también que la uses de inmediato si observas que algo perturba tu paz mental.
3. La presencia del miedo es señal inequívoca de que estás confiando en tu propia fortaleza. 2La
conciencia de que no hay nada que temer indica que en algún lugar de tu mente, aunque no
necesariamente en un lugar que puedas reconocer, has recordado a Dios y has dejado que Su fortaleza
ocupe el lugar de tu debilidad. 3En el instante en que estés dispuesto a hacer eso, ciertamente no habrá
nada que temer.
VIDEO
LECCIÓN 49 UCDM
La Voz de Dios me habla durante todo el día.
1. Es muy posible escuchar la Voz de Dios durante todo el día sin que ello interrumpa para nada tus
actividades normales. 2La parte de tu mente donde reside la verdad está en constante comunicación con
Dios, tanto si eres consciente de ello como si no. 3Es la otra parte de tu mente la que opera en el mundo y
la que obedece sus leyes. 4Ésa es la parte que está constantemente distraída, y que es desorganizada y
sumamente insegura.
2. La parte que está escuchando a la Voz de Dios es serena, está en continuo reposo y llena de absoluta
seguridad. 2Es la única parte que realmente existe. 3La otra es una loca ilusión, frenética y perturbada,
aunque desprovista de toda realidad. 4Trata hoy de no prestarle oídos. 5Trata de identificarte con la parte
de tu mente donde la quietud y la paz reinan para siempre. 6Trata de oír la Voz de Dios llamándote
amorosamente recordándote que tu Creador no se ha olvidado de Su Hijo.
3. Hoy necesitaremos por lo menos cuatro sesiones de práctica de cinco minutos cada una, e incluso más
si es posible. 2De hecho, trataremos de oír la Voz de Dios recordándote a Dios y a tu Ser. 3Abordaremos el
más santo y gozoso de todos los pensamientos llenos de confianza, sabiendo que al hacer esto estamos
uniendo nuestra voluntad a la Voluntad de Dios. 4Él quiere que oigas Su Voz. 5Te la dio para que la oyeses.
4. Escucha en profundo silencio. 2Permanece muy quedo y abre tu mente. 3Ve más allá de todos los
chillidos estridentes e imaginaciones enfermizas que encubren tus verdaderos pensamientos y empañan tu
eterno vínculo con Dios: 4Sumérgete profundamente en la paz que te espera más allá de los frenéticos y
tumultuosos pensamientos, sonidos e imágenes de este mundo demente. 5No vives aquí. 6Estamos
tratando de llegar a tu verdadero hogar. 7Estamos tratando de llegar al lugar donde eres verdaderamente
bienvenido. 8Estamos tratando de llegar a Dios.
5. No te olvides de repetir la idea de hoy frecuentemente. 2Hazlo con los ojos abiertos cuando sea
necesario, pero ciérralos siempre que sea posible. 3Y asegúrate de sentarte quedamente y de repetir la
idea cada vez que puedas, cerrando los ojos al mundo, y comprendiendo que estás invitando a la Voz de
Dios a que te hable.
VIDEO
LECCIÓN 50 UCDM
El Amor de Dios es mi sustento.
1. He aquí la respuesta a cualquier problema que se te presente, hoy, mañana o a lo largo del tiempo.
2Crees que lo que te sustenta en este mundo es todo menos Dios. 3Has depositado tu fe en los símbolos más
triviales y absurdos: en píldoras, dinero, ropa "protectora", influencia, prestigio, caer bien, estar "bien"
relacionado y en una lista interminable de cosas huecas y sin fundamento a las que dotas de poderes
mágicos.
2. Todas esas cosas son tus sustitutos del Amor de Dios. 2Todas esas cosas se atesoran para asegurar la
identificación con el cuerpo. 3Son himnos de alabanza al ego. 4No deposites tu fe en lo que no tiene valor.
5No te sustentará.
3. Sólo el Amor de Dios te protegerá en toda circunstancia. 2Te rescatará de toda tribulación y te elevará por
encima de todos los peligros que percibes en este mundo a un ambiente de paz y seguridad perfectas. 3Te
llevará a un estado mental que no puede verse amenazado ni perturbado por nada, y en el que nada puede
interrumpir la eterna calma del Hijo de Dios.
4. No deposites tu fe en ilusiones. 2Te fallarán. 3Deposita toda tu fe en el Amor de Dios en ti: eterno,
inmutable y por siempre indefectible. 4Ésta es la respuesta a todo problema que se te presente hoy. 5Por
medio del Amor de Dios en ti puedes resolver toda aparente dificultad sin esfuerzo alguno y con absoluta
confianza. 6Dite esto a ti mismo con frecuencia hoy. 7Es una declaración de que te has liberado de la
creencia en ídolos. 8Es tu reconocimiento de la verdad acerca de ti.
5. Durante diez minutos dos veces al día, una por la mañana y otra por la noche, deja que la idea de hoy se
adentre muy hondo en tu conciencia. 2Repítela, reflexiona sobre ella, deja que pensamientos afines vengan a
ayudarte a reconocer su verdad, y permite que la paz se extienda sobre ti como un manto de protección y
seguridad. 3 No permitas que ningún pensamiento vano o necio venga a perturbar la santa mente del Hijo de
Dios. 4Tal es el Reino de los Cielos. 5Tal es el lugar de descanso donde tu Padre te ubicó eternamente.
PRIMER REPASO
Introducción
1. Hoy comenzaremos una serie de sesiones de repaso. 2Cada una de ellas abarcará cinco de las ideas ya
presentadas; comenzando con la primera y terminando con la quincuagésima. 3A cada idea le siguen un
breve comentario que debes tener en cuenta al hacer tu repaso. 4Durante las sesiones de práctica, los
ejercicios deben llevarse a cabo de la siguiente manera:
2. Comienza el día leyendo las cinco ideas, incluyendo los comentarios. 2De ahí en adelante no es necesario
seguir un orden determinado al repasarlas, aunque se debe practicar con cada una de ellas por lo menos
una vez. 3Dedica dos minutos o más a cada sesión de práctica, pensando en la idea y en los comentarios
que le siguen después que los hayas leído. 4Haz esto tan a menudo como te sea posible durante el día. 5Si
una de las cinco ideas te atrae más que las otras, concéntrate en ella. 6Sin embargo, asegúrate de
repasarlas todas una vez más al final del día.
3. No es necesario abarcar, ni literal ni concienzudamente, los comentarios que siguen a cada idea en las
sesiones de práctica. 2Trata, más bien, de poner de relieve el punto central y de pensar en dicho comentario
como parte de tu repaso de la idea en cuestión. 3Después de leer la idea y sus comentarios, los ejercicios
deben hacerse, a ser posible, con los ojos cerrados y cuando estés solo en un lugar tranquilo.
4. Hacemos hincapié en este procedimiento para las sesiones de práctica debido a la etapa de aprendizaje
en la que te encuentras. 2Es necesario, sin embargo, que aprendas que no necesitas ningún ambiente
especial donde aplicar lo que has aprendido. 3Tendrás más necesidad de tu aprendizaje en aquellas
situaciones que parecen desagradables que en las que aparentan ser apacibles y serenas. 4El propósito de
tu aprendizaje es capacitarte para que la quietud te acompañe donde quiera que vayas, y para que cures
toda aflicción e inquietud. 5Esto no se consigue evadiendo tales situaciones y buscando un refugio donde
poder aislarte.
5. Ya aprenderás que la paz forma parte de ti y que sólo requiere que estés presente para que ella envuelva
cualquier situación en la que te encuentres. 2Y finalmente aprenderás que no hay límite con respecto a dónde
tú estás, de modo que tu paz está en todas partes, al igual que tú.
6. Notarás que, para los efectos de este repaso, algunas de las ideas no se presentan en su forma original. 2Úsalas
tal como se presentan aquí. 3No es necesario volver a las lecciones originales, ni aplicar las ideas tal como se sugirió
entonces. 4En lo que ahora estamos haciendo hincapié es en la relación que existe entre las primeras cincuenta
ideas que hemos presentado hasta el momento y en la cohesión del sistema de pensamiento hacia el cual te están
conduciendo.
VIDEO
LECCIÓN 51 UCDM
El repaso de hoy abarca las siguientes ideas:
36
1. (1) Nada de lo que veo significa riada.
2La razón de que esto sea así es que veo lo que no es nada y lo que no es nada no tiene significado. 3Es necesario
que reconozca esto, para poder aprender a ver. 4Lo que ahora creo ver ocupa el lugar de la visión. 5Tengo que
desprenderme de ello dándome cuenta de que no significa nada, para que de este modo la visión pueda ocupar el
lugar que le corresponde.
2. (2) Le he dado a todo lo que veo todo el significado que tiene para mí.
2He juzgado todo lo que veo, y eso, y sólo eso, es lo que veo. 3Eso no es visión. 4Es meramente una ilusión de
realidad porque he juzgado sin tomar en cuenta la realidad. 5Estoy dispuesto a reconocer la falta de validez de mis
juicios porque quiero ver. 6Mis juicios me han hecho daño, y no quiero ver basándome en ellos.
3. (3) No entiendo nada de lo que veo.
2¿Cómo puedo entender lo que veo si lo he juzgado erróneamente? 3Lo que veo es la proyección de mis propios
errores de pensamiento. 4No entiendo lo que veo porque no es comprensible. 5No tiene sentido tratar de
entenderlo. 6Pero sí tiene sentido que me desprenda de ello y dé cabida a lo que se puede ver, entender y amar.
7Puedo intercambiar lo que ahora veo por ésto, sólo con estar dispuesto a ello. 8¿No es ésta una mejor elección que
la que hice antes?
4. (4) Estos pensamientos no significan nada.
2Los pensamientos de los que soy consciente no significan nada porque estoy tratando de pensar sin Dios. 3 Lo que yo
llamo "mis" pensamientos no son mis pensamientos reales en absoluto. 4Mis pensamientos reales son los
pensamientos que pienso con Dios. 5No soy consciente de ellos porque he inventado mis pensamientos para que
ocupasen su lugar. 6Estoy dispuesto a reconocer que mis pensamientos no significan nada y a abandonarlos. 7 Elijo
reemplazarlos por los que ellos tuvieron como propósito reemplazar. 8Mis pensamientos no significan nada, sin
embargo, toda la creación descansa en los pensamientos que pienso con Dios.
5. (5) Nunca estoy disgustado por la razón que creo.
2Nunca estoy disgustado por la razón que creo porque estoy tratando constantemente de justificar mis pensamientos.
3Estoy tratando constantemente de hacer que sean verdad. 4 Hago de todas las cosas mi enemigo de modo que mi ira
esté justificada y mis ataques sean merecidos. 5No me he dado cuenta del mal uso que he hecho de todo lo que veo
asignándole ese papel. 6 He hecho esto para defender un sistema de pensamiento que me ha hecho daño y que ya no
deseo. 7Estoy dispuesto a abandonarlo.
VIDEO
LECCIÓN 52 UCDM
El repaso de hoy abarca las siguientes ideas:
1. (6) Estoy disgustado porque veo algo que no está ahí.
2La realidad no es nunca atemorizante. 3Es imposible que pudiese disgustarme. 4La realidad sólo brinda perfecta paz.
5Cuando estoy disgustado es porque he reemplazado- la realidad con ilusiones que yo mismo he fabricado. 6Las
ilusiones me causan disgusto porque al haberles conferido realidad, veo la realidad como una ilusión. 7Nada en la
creación de Dios se ve afectado en modo alguno por mi confusión. 8Siempre estoy disgustado por nada.
2. (7) Sólo veo el pasado.
2Cuando miro a mi alrededor, condeno el mundo que veo. 3A eso es a lo que yo llamo ver. 4Uso el pasado en contra de
todo el mundo y de todas las cosas, convirtiéndolos así en mis enemigos. 5Cuando me haya perdonado a mí mismo y
haya recordado Quién soy, bendeciré a todo el mundo y a todo cuanto vea. 6No habrá pasado, y, por lo tanto, tampoco
enemigos. 7Y contemplaré con amor todo aquello que antes no podía ver.
3. (8) Mi mente está absorbida con pensamientos del pasado.
2Veo únicamente mis propios pensamientos, y mi mente está absorbida con el pasado. 3¿Qué es lo que puedo ver,
entonces, tal como es? 4Permítaseme recordar que me fijo en el pasado para prevenir que el presente alboree en mi
mente. 5Permítaseme entender que estoy tratando de usar el tiempo en contra de Dios. 6Permítaseme aprender a
dejar atrás el pasado, dándome cuenta de que al hacer eso no estoy renunciando a nada.
4. (9) No veo nada tal como es ahora.
37
2Si no veo nada tal como es ahora, ciertamente se puede decir que no veo nada. 3Solamente puedo ver lo
que está aquí ahora. 4La elección no es entre si ver el pasado o el presente; la elección es sencillamente
entre ver o no ver. 5Lo que he elegido ver me ha costado la visión. 6Ahora quiero elegir de nuevo, para
poder ver.
5. (10) Mis pensamientos no significan nada.
2No tengo pensamientos privados. 3Sin embargo, es únicamente de. mis pensamientos privados de los que
soy consciente. 4¿Qué significado pueden tener dichos pensamientos? 5No existen, de modo que no
significan nada. 6No obstante, mi mente es parte de la creación y parte de su Creador. 7¿No sería acaso
preferible que me uniese al pensamiento del universo en vez de oscurecer todo aquello que realmente me
pertenece con mis míseros e insignificantes pensamientos "privados"?
VIDEO
LECCIÓN 53 UCDM
Hoy repasaremos lo siguiente:
1. (11) Mis pensamientos sin significado me están mostrando un mundo sin significado.
2Dado que los pensamientos de que soy consciente no significan nada, el mundo que los refleja no puede
tener significado. 3Lo que da lugar a este mundo es algo demente, como lo es también el resultado de ello.
4La realidad no es demente, y yo tengo pensamientos reales así como dementes. 5Por lo tanto, puedo ver
un mundo real, si recurro a mis pensamientos reales como guía para ver.
2. (12) Estoy disgustado porque veo un mundo que no tiene significado.
2Los pensamientos dementes perturban. 3Dan lugar a un mundo en el que no hay orden de ninguna clase.
4Sólo el caos puede regir en un mundo que representa una manera de pensar caótica, y el caos es la
ausencia total de leyes. 5No puedo vivir en paz en un mundo así. 6Estoy agradecido de que este mundo no
sea real, y de que no necesito verlo en absoluto, a menos que yo mismo elija otorgarle valor. 7Elijo no
otorgarle valor a lo que es completamente demente y no tiene significado.
3. (13) Un mundo sin significado engendra temor.
2Lo que es totalmente demente engendra temor porque no se puede contar con ello en absoluto, ni da pie
a que se le tenga confianza. 3En la demencia no hay nada en lo que se pueda confiar. 4No ofrece
seguridad ni esperanza. 5Pero un mundo así no es real. 6Le he conferido la ilusión de realidad y he sufrido
por haber creído en él. 7Elijo ahora dejar de creer en él y depositar mi confianza en la realidad. 8Al elegir
esto, me escaparé de todos los efectos del mundo del miedo porque estaré reconociendo que no existe.
4. (14) Dios no creó un mundo sin significado.
2¿Cómo puede ser que exista un mundo sin significado si Dios no lo creó? 3Él es la Fuente de todo
significado y todo lo que es real está en Su Mente. 4Está en mi mente también porque Él lo creó conmigo.
5¿Por qué he de seguir sufriendo por los efectos de mis pensamientos dementes cuando la perfección de
la creación es mi hogar? 6Quiero recordar el poder de mi decisión y reconocer mi verdadera morada.
5. (15) Mis pensamientos son imágenes que yo mismo he fabricado.
2Todo lo que veo refleja mis pensamientos. 3Son mis pensamientos los que me dicen dónde estoy y lo que
soy. 4El hecho de que vea un mundo en el que hay sufrimiento, en el que se puedan experi mentar pérdidas
y en el que se pueda morir, me muestra que lo único que estoy viendo es la representación de mis
pensamientos dementes, y que no estoy permitiendo que mis pensamientos reales viertan su benéfica luz
sobre lo que veo. 5No obstante, el camino de Dios es seguro. 6Las imágenes que he fabricado no pueden
prevalecer contra Él porque no es mi voluntad que lo hagan. 7Mi voluntad es la Suya, y no antepondré
otros dioses a Él.
VIDEO
LECCIÓN 54 UCDM
Éstas son las ideas para el repaso de hoy:
1. (16) No tengo pensamientos neutros.
38
2Tener pensamientos neutros es imposible porque todos los pensamientos tienen poder. 3O bien dan lugar
a un mundo falso o bien me conducen al mundo real. 4Pero es imposible que no tengan efectos. 5Del
mismo modo en que el mundo que veo procede de mis errores de pensamiento, así también el mundo real
se alzará ante mis ojos cuando permita que mis errores sean corregidos. 6Mis pensamientos no pueden
ser simultáneamente verdaderos y falsos. 7Tienen que ser lo uno o lo otro. 8Lo que veo me muestra si son
verdaderos o falsos.
2. (17) No veo cosas neutras.
2Lo que veo da testimonio de lo que pienso. 3Si no pensase no existiría, ya que la vida es pensamiento.
4Permítaseme mirar al mundo que veo como la representación de mi propio estado de ánimo. 5Sé que éste
puede cambiar. 6Y sé asimismo que el mundo que veo puede cambiar también.
3. (18) No soy el único que experimenta los efectos de mi manera de ver.
2Si no tengo pensamientos privados, no puedo ver un mundo privado. 3
Incluso la descabellada idea de la
separación tuvo que compartirse antes de que se pudiese convertir en la base del mundo que veo. 4Sin
embargo, cuando se compartió esa idea no se compartió nada. 5Puedo invocar también mis pensamientos
reales, los cuales comparto con todo el mundo. 6Así como mis pensamientos de separación invocan
pensamientos de separación en otros, mis pensamientos reales despiertan en ellos sus pensamientos
reales. 7Y el mundo que mis pensamientos reales me muestran alboreará en su visión así como en la mía.
4. (19) No soy el único que experimenta los efectos de mis pensamientos.
2No soy el único en nada. 3Todo lo que pienso, digo o hago es una enseñanza para todo el universo. 4Un Hijo de Dios
no puede pensar, hablar o actuar en vano. 5No puede ser el único en nada. 6Tengo, por lo tanto, el poder de cambiar a
todas las mentes junto con la mía porque mío es el poder de Dios.
5. (20) Estoy decidido a ver.
2Puesto que reconozco que la naturaleza de mis pensamientos es que los comparto con todo lo que existe, estoy
decidido a ver. 3Veré los testigos que me muestran que la manera de pensar del mundo ha cambiado. 4Veré la prueba
de que lo que se ha obrado por mediación mía ha permitido que el amor reemplace al miedo, la risa a las lágrimas y la
abundancia a las pérdidas. 5Quiero contemplar el mundo real, y dejar que me enseñe que mi voluntad y la Voluntad de
Dios son una.
VIDEO
LECCIÓN 55 UCDM
El repaso de hoy incluye lo siguiente:
1. (21) Estoy decidido a verlas cosas de otra manera.
2Lo que ahora veo no son sino signos de enfermedad, desastre y muerte. 3Esto no puede ser lo que Dios creó para Su
Hijo bien amado. 4El hecho en sí de que vea tales cosas demuestra que no entiendo a Dios. 5Por lo tanto, tampoco
entiendo a Su Hijo. 6Lo que veo me muestra que no sé quién soy. 7Estoy decidido a ver los testigos de la verdad en mí,
en vez de aquellos que me muestran una ilusión de mí mismo.
2. (22) Lo que veo es una forma de venganza.
2El mundo que veo no es en modo alguno la representación de pensamientos amorosos. 3Es un cuadro en el que todo
se ve atacado por todo. 4Es cualquier cosa menos un reflejo del Amor de Dios y del amor de Su Hijo. 5Son mis propios
pensamientos de ataque los que dan lugar a este cuadro. 6Mis pensamientos amorosos me librarán de esta percepción
del mundo y me brindarán la paz que Dios dispuso que yo tuviese.
3. (23) Puedo escaparme de este mundo renunciando a los pensamientos de ataque.
2En esto, y sólo en esto, radica la salvación. 3Si no albergase pensamientos de ataque no podría ver un mundo de
ataque. 4A medida que el perdón permita que el amor retorne a mi conciencia, veré un mundo de paz, seguridad y
dicha. 5Y esto es lo que elijo ver, en lugar de lo que ahora contemplo.
4. (24) No percibo lo que más me conviene.
2¿Cómo podría reconocer lo que más me conviene si no sé quién soy? 3Lo que yo creo que más me convendría no
haría sino atarme aún más al mundo de las ilusiones. 4Estoy dispuesto a seguir al Guía que Dios me ha dado para
descubrir qué es lo que más me conviene, reconociendo que no puedo percibirlo por mi cuenta.
39
5. (25) No sé cuál es el propósito de nada.
2Para mí, el propósito de todas las cosas es probar que las ilusiones que abrigo con respecto a mí mismo son reales.
3Para eso es para lo que trato de usar a todo el mundo y todas las cosas. 4Para eso es para lo que creo que es el
mundo. 5Por lo tanto, no reconozco su verdadero propósito. 6El propósito que le he asignado ha dado lugar a una
imagen aterradora del mismo. 7Quiero que mi mente se vuelva receptiva al verdadero propósito del mundo
renunciando al que le he asignado, y descubrir la verdad acerca de él.
VIDEO
LECCIÓN 56 UCDM
Nuestro repaso de hoy abarca lo siguiente:
1. (26) Mis pensamientos de ataque atacan mi invulnerabilidad.
2¿Cómo puedo saber quién soy cuando creo estar sometido a continuos ataques? 3El dolor, la enfermedad, la pérdida,
la vejez y la muerte parecen acecharme. 4Todas mis esperanzas, aspiraciones y planes parecen estar a merced de un
mundo que no puedo controlar. 5Sin embargo, la seguridad perfecta y la plena realización constituyen mi verdadera
herencia. 6He tratado de despojarme de mi herencia a cambio del mundo que veo. 7Pero Dios la ha salvaguardado
para mí. 8Mis pensamientos reales me enseñarán lo que es mi herencia.
2. (27) Por encima de todo quiero ver.
2Al reconocer que lo que veo es un reflejo de lo que creo ser, me doy cuenta de que mi mayor necesidad es la visión.
3El mundo que veo da testimonio de cuán temerosa es la naturaleza de la imagen que he forjado de mí mismo. 4Si he
de recordar quién soy, es esencial que abandone esta imagen de mí mismo. 5A medida que dicha imagen sea
reemplazada por la verdad, se me concederá la visión. 6Y con esta visión contemplaré al mundo y a mí mismo con
caridad y con amor.
3. (28) Por encima de todo quiero ver de otra manera.
2El mundo que veo mantiene en vigor la temerosa imagen que he forjado de mí mismo y garantiza su continuidad.
3Mientras siga viendo el mundo tal como lo veo ahora, la verdad no podrá alborear en mi conciencia. 4Dejaré que la
puerta que se encuentra detrás de este mundo se abra, para así poder mirar más allá de él al mundo que refleja el
Amor de Dios.
4. (29) Dios está en todo lo que veo.
2Tras cada imagen que he forjado, la verdad permanece inmutable. 3Tras cada velo que he corrido sobre la faz del
amor, su luz sigue brillando sin menoscabo. 4Más allá de todos mis descabellados deseos se encuentra mi voluntad,
unida a la Voluntad de mi Padre. 5Dios sigue estando en todas partes y en todas las cosas eternamente. 6Y nosotros,
que somos parte de Él, habremos de ver más allá de las apariencias, y reconocer la verdad que yace tras todas ellas.
5. (30) Dios está en todo lo que veo porque Dios está en mi mente.
2En mi propia mente, aunque oculto por mis desquiciados pensamientos de separación y ataque, yace el conocimiento
de que todo es uno eternamente. 3Yo no he perdido el conocimiento de Quién soy por el hecho de haberlo olvidado.
4Ha sido salvaguardado para mí en la Mente de Dios, Quien no ha abandonado Sus Pensamientos. 5Y yo, que me
cuento entre ellos, soy uno con ellos y uno con Él.
VIDEO
LECCIÓN 57 UCDM
Repasemos hoy las siguientes ideas:
1. (31) No soy víctima del mundo que veo.
2¿Cómo puedo ser la víctima de un mundo que podría quedar completamente des-hecho si así lo eligiese? 3Mis
cadenas están sueltas. 4Puedo desprenderme de ellas sólo con desearlo. 5La puerta de la prisión está abierta. 6Puedo
marcharme en cualquier momento sólo con echar a andar. 7Nada me retiene en este mundo. 8Sólo mi deseo de
permanecer aquí me mantiene prisionero. 9Quiero renunciar a mis desquiciados deseos y caminar por fin hacia la luz
del sol.
2. (32) He inventado el mundo que veo.
40
2Yo mismo erigí la prisión en la que creo encontrarme. 3Basta con que reconozca esto y quedo libre. 4Me he engañado
a mí mismo al creer que era posible aprisionar al Hijo de Dios. 5He estado terriblemente equivocado al creer esto, y ya
no lo quiero seguir creyendo. 6El Hijo de Dios no puede sino ser libre eternamente. 7 Es tal como Dios lo creó y no lo
que yo he querido hacer de él. 8El Hijo de Dios se encuentra donde Dios quiere que esté y no donde yo quise
mantenerlo prisionero.
3. (33) Hay otra manera de ver el mundo.
2Dado que el propósito del mundo no es el que yo le he asignado, tiene que haber otra manera de verlo. 3Veo todo al
revés y mis pensamientos son lo opuesto a la verdad. 4Veo el mundo como una prisión para el Hijo de Dios. 5Debe ser,
pues, que el mundo es realmente un lugar donde él puede ser liberado. 6Quiero contemplar el mundo tal como es y
verlo como un lugar donde el Hijo de Dios encuentra su libertad.
4. (34) Podría ver paz en lugar de esto.
2Cuando vea el mundo como un lugar de libertad, me daré cuenta de que refleja las leyes de Dios en lugar de las
reglas que yo inventé para que él obedeciera. 3Comprenderé que es la paz, no la guerra, lo que mora en él. 4Y
percibiré asimismo que la paz mora también en los corazones de todos los que comparten este lugar conmigo.
5. (35) Mi mente es parte de la de Dios. 2Soy muy santo.
3A medida que comparto la paz del mundo con mis hermanos empiezo a comprender que esa paz brota de lo más
profundo de mí mismo. 4El mundo que contemplo ha quedado iluminado con la luz de mi perdón y refleja dicho perdón
de nuevo sobre mí. 5En esta luz empiezo a ver lo que mis ilusiones acerca de mí mismo ocultaban. 6Empiezo a
comprender la santidad de toda cosa viviente, incluyéndome a mí mismo, y su unidad conmigo.
VIDEO
LECCIÓN 58 UCDM
Hoy vamos a repasar las siguientes ideas:
1. (36) Mi santidad envuelve todo lo que veo.
2De mi santidad procede la percepción del mundo real. 3Habiendo perdonado, ya no me considero culpable. 4Puedo
aceptar la inocencia que es la verdad con respecto a mí mismo. 5Cuando veo el mundo con los ojos del entendimiento,
sólo veo su santidad porque lo único que puedo ver son los pensamientos que tengo acerca de mí mismo.
2. (37) Mi santidad bendice al mundo.
2La percepción de mi santidad no me bendice únicamente a mí. 3Todas las personas y todo cuanto veo en su luz
comparten la dicha que mi santidad me brinda. 4No hay nada que esté excluido de esta dicha porque no hay nada que
no comparta mi santidad. 5A medida que reconozca mi santidad, la santidad del mundo se alzará resplandeciente para
que todos la vean.
3. (38) No hay nada que mi santidad no pueda hacer.
2El poder curativo de mi santidad es ilimitado porque su poder para salvar es ilimitado. 3¿De qué me tengo que salvar,
sino de las ilusiones? 4¿Y qué son las ilusiones sino falsas ideas acerca de mí? 5Mi santidad las desvanece a todas al
afirmar la verdad de lo que soy. 6En presencia de mi santidad, la cual comparto con Dios Mismo, todos los ídolos
desaparecen.
4. (39) Mi santidad es mi salvación.
2Puesto que mi santidad me absuelve de toda culpa, reconocer mi santidad es reconocer mi salvación. 3Es
también reconocer la salvación del mundo. 4Una vez que haya aceptado mi santidad, nada podrá
atemorizarme. 5Y al no tener miedo, todos compartirán mi entendimiento, que es el regalo que Dios me hizo
a mí y al mundo.
5. (40) Soy bendito por ser un Hijo de Dios.
2En esto reside mi derecho a lo bueno y sólo a lo bueno. 3Soy bendito por ser un Hijo de Dios. 4Todo lo que
es bueno me pertenece porque así lo dispuso Dios. 5Por ser Quien soy no puedo sufrir pérdida alguna, ni
privaciones ni dolor. 6Mi Padre me sustenta, me protege y me dirige en todo. 7El cuidado que me prodiga es
infinito y eterno. 8Soy eternamente bendito por ser Su Hijo.
VIDEO
LECCIÓN 59 UCDM
Éstas son las ideas a repasar hoy:
1. (41) Dios va conmigo dondequiera que yo voy.
2¿Cómo puedo estar solo cuando Dios está siempre conmigo? 3¿Cómo puedo dudar o sentirme inseguro
cuando en Él mora la perfecta certeza? 4¿Cómo puede haber algo que me pueda perturbar cuando Él mora
en mí en paz absoluta? 5¿Cómo puedo sufrir cuando el amor y la dicha me rodean por mediación Suya? 6No
he de abrigar ninguna ilusión con respecto a mí mismo. 7Soy perfecto porque Dios va conmigo dondequiera
que yo voy.
2. (42) Dios es mi fortaleza. 2La visión es Su regalo.
3Hoy no recurriré a mis propios ojos para ver. 4Quiero estar dispuesto a dejar de lado la lamentable ilusión de
que puedo ver, e intercambiarla por la visión que Dios me da. 5La visión de Cristo es Su regalo y Él me lo ha
dado. 6Hoy me valdré de este regalo de tal forma que este día me ayude a comprender la eternidad.
3. (43) Dios es mi Fuente. 2No puedo ver separado de Él.
3Puedo ver lo que Dios quiere que vea. 4No puedo ver nada más. 5Más allá de Su Voluntad sólo hay
ilusiones. 6Son éstas las que elijo cuando pienso que puedo ver separado de Él. 7Son éstas las que elijo
cuando trato de ver con los ojos del cuerpo. 8No obstante, se me ha dado la visión de Cristo para
reemplazarlos. 9A través de esta visión es como elijo ver.
4. (44) Dios es la luz en la que veo.
2No puedo ver en la oscuridad. 3Dios es la única luz. 4Por lo tanto, si he de ver, tiene que ser por medio de
Él. 5He tratado de definir lo que es ver y me he equivocado. 6Ahora se me concede poder entender que
Dios es la luz en la que veo. 7Le daré la bienvenida a la visión y al mundo feliz que me mostrará.
5. (45) Dios es la Mente con la que pienso.
2No tengo pensamientos que no comparta con Dios. 3No tengo pensamientos aparte de los Suyos porque
no tengo otra mente que la Suya. 4Puesto que soy parte de Su Mente mis pensamientos son Suyos, y Sus
Pensamientos son míos.
VIDEO
LECCIÓN 60 UCDM
Éstas son las ideas para el repaso de hoy:
1. (46) Dios es el Amor en el que perdono.
2Dios no perdona porque jamás ha condenado. 3Los que están libres de culpa no pueden culpar, y aquellos
que han aceptado su inocencia no ven nada que tengan que perdonar. 4Con todo, el perdón es el medio
por el cual reconoceré mi inocencia. 5Es el reflejo del Amor de Dios en la tierra. 6Y me llevará tan cerca del
Cielo que el Amor de Dios podrá tenderme la mano y elevarme hasta Él.
2. (47) Dios es la fortaleza en la que confío.
2No es con mi propia fortaleza con la que perdono. 3Es con la fortaleza de Dios en mí, la cual recuerdo al
perdonar. 4A medida que comienzo a ver, reconozco Su reflejo en la tierra. 5Perdono todas las cosas
porque siento Su fortaleza avivarse en mí. 6Y empiezo a recordar el Amor que decidí olvidar, pero que
nunca se olvidó de mí.
3. (48) No hay nada que temer.
2
¡Cuán seguro me parecerá el mundo cuando lo pueda ver! 3No se parecerá en nada a lo que ahora me
imagino ver. 4Todo el mundo y todo cuanto vea se inclinará ante mí para bendecirme. 5Reconoceré en
todos a mi Amigo más querido. 6¿Qué puedo temer en un mundo al que he perdonado y que a su vez me
ha perdonado a mí?
4. (49) La Voz de Dios me habla durante todo el día.
42
2No hay un solo momento en el que la Voz de Dios deje de apelar a mi perdón para salvarme. 3No hay un
solo momento en el que Su Voz deje de dirigir mis pensamientos, guiar mis actos y conducir mis pasos.
4Me dirijo firmemente hacia la verdad. 5No hay ningún otro lugar adonde pueda ir porque la Voz de Dios es
la única voz y el único guía que se le dio a Su Hijo.
5. (50) El Amor de Dios es mi sustento.
2Cuando escucho la Voz de Dios, Su Amor me sustenta. 3Cuando abro los ojos, Su Amor alumbra al mundo
para que lo pueda ver. 4Cuando perdono, Su Amor me recuerda que Su Hijo es impecable. 5Y cuando
contemplo al mundo con la visión que Él me dio, recuerdo que yo soy Su Hijo.
VIDEO
Informes:
(521) 33-15-66-25-66
Lic. Leticia Gonzalez Hernández Maestría en desarrollo humano.
�¿Te interesa enterarte de las lecciones de UCDM?
Únete al siguiente grupo de WhatsApp
-Grupo 1
https://chat.whatsapp.com/LWcySK0Cd9KDqG7A4WdkVJ
-Grupo 2
https://chat.whatsapp.com/EuRKw69hEtC8MpYusEdz98
-Grupo 3