UN CURSO DE MILAGROS APLICADO A LA CODEPENDENCIA

LECCIÓN 161 UCDM

 Dame tu bendición, santo Hijo de Dios.
1. Hoy vamos a practicar de manera diferente, y a pronunciarnos en contra de nuestra ira de modo que
nuestros temores puedan desaparecer y darle cabida al amor. 2He aquí la salvación, en las simples
palabras con las que practicamos la idea de hoy. 3He aquí la respuesta a toda tentación, pues jamás
puede dejar de darle la bienvenida al Cristo allí donde antes imperaban la ira y el miedo. 4Aquí se
consuma la Expiación, el mundo se transpone sin riesgo alguno y el Cielo queda restaurado. 5He aquí la
respuesta que te da la Voz que habla por Dios.
2. La condición natural de la mente es una de abstracción total. 2Mas una parte de ella se ha vuelto
antinatural. 3No ve todo como si fuese uno solo, 4
sino que ve únicamente fragmentos del todo, pues sólo
de esa manera puede forjar el mundo parcial que tú ves. 5El propósito de la vista es mostrarte aquello
que deseas ver. 6Todo lo que oyes le trae a la mente únicamente los sonidos que ésta desea oír.
3. Así fue como surgió lo concreto. 2Y ahora son las cosas concretas las que tenemos que usar en
nuestras prácticas. 3Se las entregamos al Espíritu Santo, de manera que Él las pueda utilizar para un
propósito diferente del que nosotros les conferimos. 4Él sólo se puede valer, para instruirnos, de lo que
nosotros hicimos, pero desde una perspectiva diferente, a fin de que podamos ver otro propósito en
todo.
4. Un hermano es todos los hermanos. 2Y en cada mente se encuentran todas las mentes, pues todas
las mentes son una. 3Ésta es la verdad. 4No obstante, ¿aclaran estos pensamientos el significado de la
creación? 5¿Te brindan estas palabras perfecta claridad? 6¿Qué parecen ser sino sonidos huecos; bellos
tal vez, correctos en el sentimiento que expresan aunque fundamentalmente incomprendidos e
incomprensibles? 7La mente que se enseñó a sí misma a pensar de manera concreta ya no puede
121aprehender la abstracción en el sentido del abarcamiento total que ésta representa. 8Necesitamos poder
ver un poco para poder aprender mucho.
5. Nos parece que es el cuerpo el que coarta nuestra libertad, el que nos hace sufrir y el que finalmente
acaba con nuestras vidas. 2Sin embargo, los cuerpos no son sino símbolos de una forma específica de
miedo. 3El miedo desprovisto de símbolos no suscita respuesta alguna, pues los símbolos pueden
representar lo que no tiene sentido. 4El amor, al ser verdad, no tiene necesidad de símbolos. 5Pero el
miedo, al ser falso, se aferra a lo concreto.
6. Los cuerpos atacan; las mentes no. 2Este pensamiento nos hace pensar sin duda en el texto, en el
que se subraya con frecuencia. 3Ésta es la razón por la que los cuerpos se convierten tan fácilmente en
símbolos del miedo. 4Se te ha instado en innumerables ocasiones a que mires más allá del cuerpo, pues
lo que éste ve es el símbolo del "enemigo" del amor que la visión de Cristo no ve. 5El cuerpo es el
blanco del ataque, ya que nadie piensa que lo que odia sea una mente. 6Sin embargo, ¿qué otra cosa
sino la mente le ordena al cuerpo a que ataque? 7¿Qué otra cosa podría ser la sede del miedo sino lo
que piensa en el miedo?
7. El odio es algo concreto. 2Tiene que tener un blanco. 3Tiene que percibir un enemigo de tal forma que
éste se pueda tocar, ver, oír y finalmente matar. 4Cuando el odio se posa sobre algo, exige su muerte
tan inequívocamente como la Voz de Dios proclama que la muerte no existe. 5El miedo es insaciable y
consume todo cuanto sus ojos contemplan, y al verse a sí mismo en todo, se siente impulsado a
volverse contra sí mismo y destruirse.
8. Quien ve a un hermano como un cuerpo lo está viendo como el símbolo del miedo. 2Y lo atacará,
pues lo que contempla es su propio miedo proyectado fuera de sí mismo, listo para atacar, y pidiendo a
gritos volver a unirse a él otra vez: 3No subestimes la intensidad de la furia que puede producir el miedo
que ha sido proyectado. 4Chilla de rabia y da zarpazos en el aire deseando frenéticamente echarle mano
a su hacedor y devorarlo.
9. Esto es lo que contemplan los ojos del cuerpo en uno que el Cielo tiene en gran estima, los ángeles
aman y Dios creó perfecto. 2Ésta es su realidad. 3Y en la visión de Cristo su hermosura se ve reflejada
de una manera tan santa y tan bella que apenas podrías contener el impulso de arrodillarte a sus pies.
4Mas en lugar de ello tomarás su mano, pues tú eres semejante a él en la visión que lo ve así. 5El
ataque que lanzas contra él es lo que es tu enemigo, pues te impide percibir que en sus manos está tu
salvación. 6Pídele únicamente eso y él te la dará. 7No le pidas que sea el símbolo de tu miedo.
8¿Pedirías acaso que el amor se destruyese a si a mismo? 9¿O preferirías que te fuese revelado y que
te liberase?
10. Hoy vamos a practicar de una manera que ya hemos intentado antes. 2Ya estás más preparado, y
hoy te acercarás más a la visión de Cristo. 3Si te propones alcanzarla, hoy lo lograrás. 4Y una vez que la hayas
alcanzado, no estarás dispuesto a aceptar los testigos que convocan los ojos del cuerpo. 5Lo que verás te traerá con
su cántico el recuerdo de melodías ancestrales. 6El Cielo no se ha olvidado de ti. 7¿No te gustaría acordarte de él?.
11. Selecciona a un hermano para que sea el símbolo de los demás y pídele la salvación. 2Visualízalo primero tan
claramente como puedas, de la misma manera en que estás acostumbrado a verlo. 3Observa su rostro, sus manos,
sus pies, su ropa. 4Obsérvalo sonreír, y ve los gestosque le has visto hacer tan a menudo que ya te resultan familiares.
5Luego piensa en esto: lo que estás viendo ahora te impide ver a aquel que te puede perdonar todos tus pecados,
arrancar con sus sagradas manos los clavos que atraviesan las tuyas y quitar de tu ensangrentada frente la corona de
espinas que tú mismo te pusiste. 6Pídele lo siguiente para que él pueda liberarte:
7Dame tu bendición, santo Hijo de Dios.
8Quiero contemplarte con los ojos de Cristo, y ver en ti mi perfecta impecabilidad.
12. Y Aquel a Quien has invocado te responderá. 2Pues oirá en ti la Voz que habla por Dios y te responderá con la
tuya. 3Contempla ahora a aquel que tan sólo habías visto como carne y hueso, y reconoce que Cristo ha venido a ti.
4La idea de hoy es la manera de escaparte del miedo y de la ira. 5Cerciórate de repetirla inmediatamente en caso de
sentir la tentación de atacar a un hermano y de percibir en él el símbolo de tu miedo. 6Y lo verás cambiar súbitamente
de enemigo a salvador; de demonio al Cristo.

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https://youtu.be/LGPHsit4T5A

 

LECCIÓN 162 UCDM

Soy tal como Dios me creó.
1. Sólo con que mantuvieses este pensamiento fijo en la mente, el mundo se salvaría. 2Lo repetiremos de vez en
cuando, según vayamos alcanzando nuevos niveles en nuestro aprendizaje. 3Y a medida que avances tendrá cada vez
más significado para ti. 4Estas palabras son sagradas, pues son las palabras que Dios dio como respuesta al mundo
que tú construiste. 5Con ellas éste desaparece, y todo lo que se ve en sus brumosas nubes y vanas ilusiones se
desvanece cuando se pronuncian estas palabras, 6pues proceden de Dios.
2. He aquí la Palabra mediante la cual el Hijo se convirtió en la felicidad de Su Padre, en Su Amor y en Su compleción.
2He aquí donde se proclama la creación y donde se honra tal como es. 3No hay sueño que no se disipe con estas
palabras; no hay pensamiento de pecado o ilusión en dicho sueño que no se desvanezca ante su poder. 4Estas
122palabras son la trompeta del despertar que resuena por todo el mundo. 5Los muertos despiertan en respuesta a su
llamada. 6Y los que viven y oyen este sonido jamás verán la muerte.
3. Santo es en verdad aquel que hace suyas estas palabras; que se levanta con ellas en su mente, las recuerda a lo
largo del día, y por la noche se las lleva consigo al irse a dormir. 2Sus sueños son felices y su descanso está
asegurado, su seguridad es indudable y su cuerpo goza de perfecta salud porque duerme y despierta con la verdad
ante sí en todo momento. 3Salvará al mundo porque le da a éste lo que él mismo recibe cada vez que practica las
palabras de la verdad.
4. Nuestra práctica de hoy es muy simple. 2Pues las palabras que utilizamos son poderosas y no necesitan
pensamientos adicionales para poder producir un cambio en la mente de aquel que las utiliza. 3Este cambio es tan
absoluto, que ahora dicha mente se convierte en la tesorería en la que Dios deposita todos Sus dones y todo Su Amor,
para que sean distribuidos por todo el mundo, se multipliquen al darse y se conserven intactos porque su compartir es
ilimitado. 4Y así aprendes a pensar con Dios. 5La visión de Cristo ha restaurado tu vista al haber rescatado tu mente.
5. Hoy te honramos a ti. 2Tienes derecho a la perfecta santidad que ahora aceptas. 3Con esta aceptación todo el
mundo se salva, pues, ¿quién seguiría abrigando el pecado cuando una santidad como ésta ha bendecido
al mundo? 4¿Quién podría desesperarse cuando la perfecta dicha es suya y está al alcance de todos como
remedio para el pesar y la miseria, para toda sensación de pérdida y para escapar totalmente del pecado y
la culpabilidad?
6. Y ¿quién no sería ahora un hermano para ti, al ser tú su salvador y redentor? 2¿Quién no te abriría su
corazón amorosamente, ansioso de unirse a uno que es tan santo como él? 3Tú eres tal como Dios te
creó. 4Estas palabras disipan la noche, y ya no hay más oscuridad. 5La luz ha venido hoy a bendecir el
mundo. 6Pues tú has reconocido al Hijo de Dios, y en ese reconocimiento radica el del mundo.

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https://youtu.be/Re6LkPxba48

 

LECCIÓN 163 UCDM

La muerte no existe. El Hijo de Dios es libre.
1. La muerte es un pensamiento que adopta muchas formas, las cuales a menudo no se reconocen. 2La
muerte puede manifestarse en forma de tristeza, miedo, ansiedad o duda; en forma de ira, falta de fe y
desconfianza; preocupación por el cuerpo, envidia, así como en todas aquellas formas en las que el deseo
de ser como no eres pueda venir a tentarte. 3Todos ésos pensamientos no son sino reflejos de la
veneración que se le rinde a la muerte como salvadora y portadora de la liberación.
2. En cuanto que encarnación del miedo, anfitrión del pecado, dios de los culpables y señor de toda ilusión
y engaño, el pensamiento de la muerte parece ser muy poderoso. 2Pues parece encerrar a todas las cosas
vivientes en sus marchitas manos y a todos los deseos y esperanzas en su puño funesto, así como
percibir toda meta únicamente a través de sus ojos invidentes. 3Los débiles, los indefensos, así como los
enfermos se postran ante su imagen, al pensar que sólo ella es real, inescapable y digna de su confianza.
4Pues la muerte es lo único que inevitablemente llegará.
3. Todas las cosas excepto la muerte parecen ser inciertas y perderse demasiado pronto
independientemente de cuán difícil haya sido adquirirlas, aNinguna de ellas parece ofrecernos seguridad
con respecto a lo que nos ha de brindar, y son propensas a defraudar las esperanzas que una vez nos
hicieron abrigar y a dejar tras sí un mal sabor de boca, en lugar de aspiraciones y sueños. 2Pero con la
muerte se puede contar. 3Pues vendrá con pasos firmes cuando haya llegado su hora: 4
Jamás cesará de
tomar todo lo que tiene vida como rehén.
4. ¿Te postrarías ante ídolos como éste? 2Aquí la fortaleza y el poderío de Dios Mismo se perciben dentro
de un ídolo hecho de barro. 3Aquí se proclama que lo opuesto a Dios es señor de toda la creación, más
fuerte que la Voluntad de Dios por la vida, o que la infinitud del amor y la perfecta e inmutable constancia
del Cielo. 4Aquí por fin se derrota la Voluntad del Padre y del Hijo; y se entierra bajo la lápida que la
muerte ha colocado sobre el cuerpo del santo Hijo de Dios.
5. Impío ahora debido a la derrota, el Hijo de Dios se ha convertido en lo que la muerte quiere hacer de él.
2En su epitafio, que la muerte ha escrito, no se menciona su nombre, pues ha pasado a ser polvo. 3En él
sólo se menciona lo siguiente: “Aquí yace un testigo de que Dios ha muerto”. 4Y esto es lo que la muerte
escribe una y otra vez, mientras sus veneradores asienten, y postrándose con sus frentes en el suelo,
susurran llenas de miedo que así es.
6. Es imposible venerar a la muerte en cualquiera de las formas que adopta, y al mismo tiempo seleccionar
unas cuantas que no favoreces y que incluso deseas evitar, mientras sigues creyendo en el resto. 2Pues la
muerte es total. 3O bien, todas las cosas mueren, o bien, todas viven y no pueden morir. 4En esto no hay
términos medios. 5Pues aquí nos encontramos de nuevo ante algo que es obvio y que debemos aceptar si
queremos gozar de cordura: lo que contradice totalmente un pensamiento no puede ser verdad, a menos que
se haya demostrado la falsedad de su opuesto.
7. La idea de que Dios ha muerto es algo tan descabellado que incluso a los dementes les resulta difícil creerlo.
2Pues implica que Dios estuvo vivo una vez y que de alguna manera murió, aparentemente asesinado por
aquellos que no querían que sobreviviese. 3Al ser la voluntad de éstos más fuerte, pudo vencer a la suya y, de
esta manera, la vida eterna sucumbió ante la muerte. 4Y al morir el Padre, murió también el hijo.
8. Puede que los que veneran la muerte tengan miedo. 2Sin embargo, ¿Pueden ser realmente temibles estos
pensamientos?. 3Si se diesen cuenta de que eso es lo que creen, se liberarían de inmediato. 4Esto es lo que tú
123les vas a mostrar hoy. 5La muerte no existe, y renunciamos a ella en todas sus formas, por la salvación de
ellos, así como por la nuestra. 6Dios no creó la muerte. 7Cualquier forma que adopte, por lo tanto, tiene que ser
una ilusión. 8Esta es la postura que hoy adoptamos. 9Y se nos concede poder mirar allende la muerte, y ver la
vida que se encuentra más allá.
9. Padre nuestro, bendice hoy nuestros ojos. 2Somos Tus Emisarios, y deseamos contemplar el glorioso reflejo
de tu amor que refulge en todas las cosas. 3Vivimos y nos movemos únicamente en Ti. 4No estamos separados
de tu vida eterna. 5La muerte no existe, pues la muerte no es Tu Voluntad. 6Y moramos allí donde Tú nos
ubicaste, en la vida que compartimos Contigo y con toda cosa viviente, para ser como Tú y parte de Ti para
siempre. 7Aceptamos Tus Pensamientos como nuestros, y nuestra voluntad es una con la Tuya eternamente.
8Amén.

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https://youtu.be/KiIHIowPT5w

 

LECCION 164 UCDM

Ahora somos uno con Aquél que es nuestra Fuente
1. ¿En qué otro momento sino ahora mismo puede reconocerse la verdad?. 2El presente es el único
tiempo que hay. 3Y así, hoy, en este mismo instante, ahora mismo, podemos contemplar lo que se
encuentra ahí eternamente, no ante nuestra vida sino ante los ojos de Cristo. 4Él mira más allá del tiempo
y ve la eternidad representada allí. 5Él oye los sonidos que engendra el insensato y ajetreado mundo,
aunque muy levemente. 6Pues más allá de ellos Él oye el himno del cielo y la voz que habla por Dios con
más claridad, con más sentido y más de cerca.
2. El mundo desaparece fácilmente ante su vista. 2Sus sonidos se vuelven más tenues. 3Una melodía
procedente de mucho más allá del mundo se vuelve cada vez más clara: una Llamada Ancestral a la que
Cristo da una respuesta ancestral. 4Tú reconocerás tanto una como otra, pues no son sino tu propia
respuesta a la llamada que te hace tu padre. 5Cristo responde por ti, haciéndose eco de tu Ser, usando tu
voz para dar Su jubiloso consentimiento y aceptando tu liberación por ti.
3. ¡Cuán santas son tus prácticas hoy, al darte Cristo su visión, al oír por ti y al contestar en tu nombre la
Llamada que Él oye!. 2
¡Cuán serenos son los momentos que pasas con Él, más allá del mundo!. 3
¡Cuán
fácilmente te olvidas de todos tus aparentes pecados y dejas de recordar todos tus pesares!. 4En este día
se dejan de lado las aflicciones, pues a ti, que hoy aceptas los dones que él te da, te resultan claros los
sonidos y las vistas procedentes de aquello que está más cerca de ti que el mundo.
4. Hay un silencio que el mundo no puede perturbar. 2Hay una paz ancestral que llevas en tu corazón y
que no has perdido. 3Hay en ti una sensación de santidad que el pensamiento de pecado jamás ha
mancillado. 4Hoy recordarás todo esto. 5La fe con la que practiques hoy te aportará recompensas tan
grandes y tan radicalmente diferentes de todas las cosas que antes perseguías, que sabrás que ahí está
tu tesoro y tu descanso.
5. Este es el día en que todas las vanas imaginaciones se descorren como si de una cortina se tratase, para
revelar lo que se encuentra tras ellas. 2Ahora se hace visible lo que realmente está ahí, mientras que todas las
sombras que parecían ocultarlo simplemente se sumergen en la nada.
3Ahora se recupera el equilibrio, y la
balanza del juicio se deja en manos de Aquel que juzga correctamente. 4Y mediante Su juicio, se
desplegará ante tus ojos un mundo de perfecta inocencia. 5Ahora lo contemplarás con los ojos de Cristo.
6Ahora su transformación te resultará evidente.
6. Hermano, éste es un día sagrado para el mundo. 2La visión que se te ha concedido, la cual procede de
mucho más allá de todas las cosas del mundo, las contempla ahora bajo una nueva. luz. 3Y lo que ves se
convierte en la curación y salvación del mundo. 4Tanto lo valioso como lo insignificante se percibe y se
reconoce tal como es. 5Y lo que es digno de tu amor recibe tu amor, y no queda nada que puedas temer.
7. Hoy no juzgaremos. 2No recibiremos sino aquello que nos llega procedente de un juicio que se emitió
desde más allá del mundo. 3Nuestras prácticas de hoy se convierten en un regalo de gratitud por nuestra
liberación de la ceguera y de la aflicción. 4Todo cuanto veamos no hará sino aumentar nuestra dicha, pues
su santidad refleja la muestra. 5Nos alzamos perdonados ante los ojos de Cristo, tal como el mundo se
alza perdonado ante los nuestros. 6Bendecimos al mundo al contemplarlo en la luz en la que nuestro
Salvador nos contempla a nosotros, y le ofrecemos la libertad que se nos ha dado a través de Su visión
redentora, no a través de la nuestra.
8. Descorre la cortina durante tus prácticas renunciando simplemente a todo lo que crees desear. 2Guarda
tus frívolos tesoros, y deja un espacio limpio y despejado en tu mente donde Cristo pueda venir a ofrecerte
el tesoro de la salvación. 3Él necesita tu santísima mente para salvar al mundo. 4¿Acaso no es este
propósito digno de ser tu objetivo? 5¿No es la visión de Cristo algo digno de procurarse en lugar de todos
los objetivos mundanos que no producen ninguna satisfacción?
9. No dejes que este día transcurra sin que los regalos que tiene reservados para ti reciban tu aprobación
y aceptación. 2Si los reconoces, podemos cambiar el mundo 3Tal vez no puedas ver el valor que tu
aceptación de ellos le ofrece al mundo. 4Pero sin duda quieres esto: poder cambiar todo sufrimiento por
dicha hoy mismo. 5Practica con fervor y ése será tu regalo. 6¿Iba Dios a engañarte? 7¿Podría dejar Él de
cumplir Su promesa? 8¿Le negarías lo poco que te pide cuando Sus Manos le ofrecen a Su Hijo la
salvación en su totalidad?

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https://youtu.be/bvgwSHZ6TDo

 

LECCION 165 UCDM

Que mi mente no niegue el Pensamiento de Dios.
1. ¿Qué es lo que hace que este mundo parezca real sino tu negación de la verdad que se encuentra más
allá de él? 2¿Qué otra cosa sino tus pensamientos de aflicción y de muerte ensombrecen la perfecta
felicidad y vida eterna que la Voluntad de tu Padre dispone para ti? 3¿Y qué otra cosa sino las ilusiones
podrían ocultar lo que no puede ser ocultado? 4¿Qué podría privarte de lo que te pertenece sino tu propia
decisión de no verlo, al negar que se encuentra ahí?
2. El Pensamiento de Dios te creó. 2Y no te ha abandonado, ni tú has estado nunca separado de él ni
siquiera por un instante. 3Te pertenece. 4Gracias a él vives. 5Es tu Fuente de vida, pues te mantiene unido
a él, y todo es uno contigo porque él jamás te abandonó. 6El Pensamiento de Dios te protege, cuida de ti,
hace que tu lecho sea mullido y allana tu camino, al iluminar tu mente con gozo y amor. 7Tanto la eternidad
como la vida eterna refulgen en tu mente porque el Pensamiento de Dios no te ha abandonado y todavía
se encuentra en ti.
3. ¿Quién negaría su seguridad, su paz, su alegría, su curación y tranquilidad de espíritu, así como su
sereno descanso y apacible despertar, si reconociese dónde se encuentran? 2¿No se prepararía de
inmediato para salir a su encuentro, abandonando todo lo demás como algo sin valor en comparación? 3Y
una vez que los hubiera encontrado, ¿no se aseguraría de que permanecieran con él y él con ellos?
4. No niegues el Cielo. 2Hoy se te concede sólo con que lo pidas. 3No es necesario tampoco que percibas
cuán grande es este regalo ni cuánto habrá cambiado tu mente antes de que te llegue. 4Pídelo y se te
concederá. 5La convicción radica en él. 6Hasta que no le des la bienvenida como algo que te pertenece,
seguirás en la incertidumbre. 7Mas Dios es justo. 8No tienes que tener certeza para recibir lo que sólo tu
aceptación puede otorgar.
5. Pide con fervor. 2No tienes que estar seguro de que lo que estás pidiendo es lo único que deseas. 3Mas
cuando lo hayas recibido sabrás que estás en posesión del tesoro que siempre anhelaste. 4¿Por qué otra
cosa ibas a querer intercambiarlo? 5¿Qué podría inducirte ahora a dejarlo desaparecer de tu extática
visión? 6Pues verlo te demuestra que has cambiado tu ceguera por los ojos videntes de Cristo, y que tu
mente ha decidido abandonar la negación y aceptar el Pensamiento de Dios como tu herencia.
6. Y ahora las dudas son cosa del pasado, el final de la jornada es indudable y se te ha concedido la
salvación. 2Ahora el poder de Cristo mora en tu mente, para que puedas curar tal como fuiste curado.
3Pues ahora te cuentas entre los salvadores del mundo. 4Ése es tu único destino. 5¿Consentiría Dios
acaso que Su Hijo permaneciese eternamente hambriento por haberse negado a sí mismo el sustento que
le es menester para poder vivir? 6La abundancia mora en él, y la privación no puede separarlo del Amor
vivificante de Dios, ni de su hogar.
7. Practica hoy lleno de esperanza. 2Pues tener esperanzas está ciertamente justificado. 3Tus dudas no
tienen sentido, pues Dios goza de perfecta certeza. 4Y el Pensamiento de Él nunca está ausente. 5La
certeza no puede sino morar en ti que eres Su anfitrión. 6Este curso elimina toda duda que hayas
interpuesto entre Él y tu certeza acerca de Él.
8. Contamos con Dios, no con nosotros mismos, para que nos dé certeza. 2Y en Su Nombre practicamos
tal como Su Palabra nos indica que hagamos. 3Su certeza se encuentra tras cada una de nuestras dudas.
4Su Amor, tras cada uno de nuestros temores. 5El Pensamiento de Él todavía se encuentra en nuestras
mentes más allá de todo sueño, tal como Su Voluntad dispone.

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https://youtu.be/TIT58TRsiCU

 

LECCION 166 UCDM 

Se me han confiado los dones de Dios.
1. Se te ha dado todo. 2La confianza que Dios tiene en ti es infinita. 3Él conoce a Su Hijo. 4Él da sin hacer
excepciones y sin reservarse nada que pudiera contribuir a tu felicidad. 5Sin embargo, a menos que tu
voluntad sea una con la Suya, no podrás recibir Sus dones. 6Mas ¿qué podría hacerte pensar que hay otra
voluntad aparte de la Suya?
2. He aquí la paradoja que sirve de fundamento a la fabricación de este mundo. 2Este mundo no es la
Voluntad de Dios, por lo tanto, no es real. 3No obstante, aquellos que creen que lo es no pueden sino creer
que hay otra voluntad, la cual produce efectos opuestos a los que Él dispone. 4Esto es claramente
imposible, mas la mente de aquel que contempla el mundo y lo juzga como real, sólido, digno de confianza
y verdadero cree en dos creadores, o mejor dicho en uno: él mismo. 5Mas nunca en un solo Dios.
3. Todo aquel que alberga creencias tan extrañas como éstas no puede aceptar los dones de Dios, 2pues
se ve obligado a creer que aceptarlos, por muy evidentes que se vuelvan, por muy grande que sea la
urgencia con la que se le exhorta a reclamarlos como propios, es verse presionado a traicionarse a sí
mismo. 3Por lo tanto, tiene que negar la existencia de dichos dones, contradecir la verdad y sufrir para
preservar el mundo que él mismo construyó.
4. He aquí el único hogar que cree conocer. 2He aquí la única seguridad que cree poder encontrar. 3Sin
ese mundo que él mismo construyó se siente como un paria, sin hogar y preso del miedo. 4No se da
cuenta de que en ese mundo es donde en verdad es presa del miedo y donde no tiene un hogar; donde es
125un paria que en su vagar se ha alejado tanto de su hogar, y por tanto tiempo, que no se da cuenta de que
se ha olvidado de dónde vino, adónde va, e incluso de quién es en realidad.
5. No obstante, los dones de Dios lo acompañan en su solitario e insensato vagar, aunque él no se dé
cuenta. 2No puede perderlos. 3Pero no ve lo que se le ha dado. 4Continúa errante, consciente de la
futilidad que le rodea por todas partes, viendo cómo lo poco que tiene no hace sino menguar, conforme él
sigue adelante sin ir a ninguna parte. 5Pero aun así, continúa deambulando en la miseria y en la pobreza,
solo, aunque Dios está con él, y en posesión de un tesoro tan grande que, ante su magnitud, todo lo que el
mundo ofrece no tiene ningún valor.
6. Su aspecto da lástima, está cansado y rendido, viene harapiento, y los pies están ensangrentados por
los abrojos del camino que ha venido recorriendo. 2No hay nadie que no se haya identificado con él, pues
todo el que viene aquí ha seguido la misma senda que él recorre, y se ha sentido derrotado y
desesperanzado tal como él se siente ahora. 3Mas, ¿es su situación realmente trágica, si te percatas de
que está recorriendo el camino que él mismo eligió, y que no tiene más que darse cuenta de Quién camina
a su lado y abrir sus tesoros para ser libre?
7. Este es el ser que has elegido, el que forjaste para reemplazar a la realidad. 2Éste es el ser que
defiendes ferozmente contra toda muestra de razón, toda prueba, así como contra todos los testigos que
te pueden demostrar que eso no es lo que tú eres. 3No les haces caso. 4Sigues el camino que te has
trazado, cabizbajo, no vaya a ser que captes un atisbo de la verdad, te libres del autoengaño y quedes en
libertad.
8. Te retraes temerosamente no vaya a ser que sientas el toque de Cristo sobre tu hombro y percibas Su
amorosa mano apuntando hacia tus dones. 2¿Cómo podrías decir entonces que la pobreza te acompaña
en el exilio? 3Él te haría reír de semejante percepción de ti mismo. 4¿Cómo podrías entonces seguir
teniendo lástima de ti mismo? 5¿Y qué pasaría entonces con toda la tragedia que procuraste para aquel
que Dios dispuso que gozase únicamente de dicha?
9. Tu miedo ancestral te ha salido al encuentro ahora, y por fin la justicia ha dado contigo. 2Cristo ha
puesto Su mano sobre tu hombro, y ya no te sientes solo. 3Piensas incluso que el miserable yo que creíste
ser tal vez no sea tu verdadera Identidad. 4Tal vez la Palabra de Dios sea más cierta que la tuya. 5Tal vez
los dones que Él te ha dado son reales. 6Tal vez tu plan de mantener a Su Hijo sepultado en el olvido y de
seguir por el camino que elegiste recorrer separado de tu Ser no lo ha engañado del todo.
10. La Voluntad de Dios no se opone a nada. 2Simplemente es. 3No es a Dios a Quien has aprisionado con
tu plan de querer perder tu Ser. 4Él no sabe nada de un plan tan ajeno a Su Voluntad. 5Hubo una
necesidad que Él no entendió, y Él simplemente dio una Respuesta. 6Eso es todo. 7Y tú, a quien se le ha
dado esa Respuesta, no tienes necesidad de nada más.
11. Ahora vivimos, pues ahora no podemos morir. 2El deseo de morir ha recibido respuesta, y la vista
mediante la cual se contemplaba a la muerte ha sido sustituida por una visión que percibe que tú no eres
lo que pretendes ser. 3Uno que marcha a tu lado le ofrece a cada uno de tus temores esta piadosa
respuesta: "Eso no es cierto". 4Cada vez que el pensamiento de pobreza te oprime, Él te recuerda todos
los dones que posees, y cuando te percibes solo y atemorizado, te recuerda que Él siempre está a tu lado.
12. Y te recuerda también algo más que tú habías olvidado. 2Pues al tocarte ha hecho que seas igual que
Él. 3Los dones que posees no son sólo para ti. 4Ahora tienes que aprender a dar lo que Él vino a ofrecerte.
5Esta es la lección que está implícita en lo que Él da, pues Él te ha salvado de la soledad que quisiste
forjar para ocultarte de Dios. 6Él te ha recordado todos los dones con los que Dios te bendijo. 7Te habla
asimismo de aquello en lo que se ha de convertir tu voluntad cuando los aceptes y reconozcas que son
tuyos.
13. Los dones de Dios te pertenecen, y se te han confiado para que se los des a todos aquellos que eligen
recorrer el solitario camino del que tú te has escapado. 2Ellos no entienden que lo único que están
haciendo es ir en pos de sus deseos. 3Ahora eres tú quien les tiene que enseñar. 4Pues has aprendido de
Cristo que hay otro camino que pueden recorrer. 5Les puedes enseñar esto demostrándoles la felicidad
que colma a aquellos que sienten el toque de Cristo y que reconocen los dones de Dios. 6No permitas que
tus pesares te tienten a no ser fiel a tu cometido.
14. Tus suspiros no harían ahora sino truncar las esperanzas de aquellos que cuentan contigo para su
liberación. 2Tus lágrimas son las suyas. 3Si enfermas, no haces sino impedir su curación. 4Tus temores no
hacen sino enseñarles que los suyos están justificados. 5Tu mano se convierte en la que otorga el toque
de Cristo; tu cambio de mentalidad se convierte en la prueba de que quien acepta los dones de Dios jamás
puede sufrir por nada. 6Se te ha encomendado liberar al mundo de su dolor.
15. No lo defraudes. 2Conviértete en la prueba viviente de lo que el toque de Cristo puede ofrecerle a todo
el mundo. 3Dios te ha confiado Sus dones. 4
¡Que tu felicidad dé testimonio de la gran transformación que
experimenta la mente que elige aceptarlos y sentir el toque de Cristo! 5Ésa es tu misión ahora. 6Pues Dios
les ha encomendado a todos los que reciben Sus dones que a su vez los den. 7Él ha compartido Su gozo
contigo. 8Áhora tú vas a compartirlo con el mundo.

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https://youtu.be/ST7LHYCLKKw

 

LECCION 167 UCDM

Sólo hay una vida y ésa es la vida que comparto con Dios.
1261. No existen diferentes clases de vida, pues la vida es como la verdad. 2No admite grados. 3Es la única
condición que todo lo que Dios creó comparte. 4Y al igual que todos Sus Pensamientos, no tiene opuesto.
5La muerte no existe porque lo que Dios creó comparte Su Vida. 6La muerte no existe porque Dios no tiene
opuesto. 7La muerte no existe porque el Padre y el Hijo son uno.
2. En este mundo parece haber un estado que es lo opuesto a la vida. 2Tú lo llamas muerte. 3Sin embargo,
hemos aprendido que la idea de la muerte adopta muchas formas. 4Es la idea subyacente a todos los
sentimientos que no son de suprema felicidad. 5Es la alarma a la que respondes cuando reaccionas de
cualquier forma que no sea con perfecta alegría. 6Todo pesar, sensación de pérdida, ansiedad, sufrimiento
y dolor, e incluso el más leve suspiro de cansancio, cualquier ligera incomodidad o fruncimiento de ceño,
dan testimonio de la muerte. 7Por lo tanto, niegan que vives.
3. Tú crees que la muerte es algo que sólo tiene que ver con el cuerpo. 2Sin embargo, es sólo una idea, y
no tiene nada que ver con lo que se considera físico. 3Los pensamientos se encuentran en la mente.
4Éstos pueden entonces aplicarse según lo dicte la mente. 5Y es en su punto de origen donde debe
efectuarse el cambio si es que éste ha de tener lugar. 6Las ideas no abandonan su fuente. 7El énfasis que
este curso ha puesto en esta idea se debe al papel central que ocupa en nuestros intentos de que cambies
de parecer con respecto a ti mismo. 8Es la razón de que puedas curar. 9Es la causa de la curación. 10Es la
razón de que no puedas morir. 11Su veracidad te estableció como uno con Dios.
4. La muerte es el pensamiento de que estás separado de tu Creador. 2Es la creencia de que las
condiciones cambian y de que las emociones varían debido a causas que no están bajo tu control, que no
son obra tuya y que tú jamás puedes cambiar. 3Es la creencia fija de que las ideas pueden abandonar su
fuente y adquirir cualidades que ésta no posee, convirtiéndose así en algo diferente de su origen, aparte
de éste en lo relativo a su naturaleza, así como en lo relativo al tiempo, a la distancia y a la forma.
5. La muerte no puede proceder de la vida. 2Las ideas permanecen unidas a su fuente. 3Pueden extender
todo lo que su fuente contiene. 4En este sentido, pueden ir mucho más allá de sí mismas. 5Pero no pueden
dar origen a lo que jamás se les dio. 6Tal como fueron concebidas, así será como ellas a su vez conciban.
7Tal como nacieron, así es como darán a luz. 8Y de allí de donde provinieron, allí mismo regresarán.
6. La mente puede pensar que duerme, pero eso es todo. 2No puede cambiar su estado de vigilia. 3No
puede hacer un cuerpo, ni tampoco habitar en un cuerpo. 4Lo que es ajeno a la mente no existe porque no
tiene una fuente. 5La mente crea todas las cosas que existen, pero no puede otorgarles los atributos que
no posee, ni tampoco cambiar su propio estado eterno de plena conciencia. 6No puede dar lugar a lo
físico. 7Lo que parece morir no es sino la señal de que la mente está dormida.
7. Lo opuesto a la vida tan sólo puede ser otra forma de vida. 2Como tal, se puede reconciliar con lo que la
creó porque no es realmente un opuesto. 3Su forma puede cambiar, así como aparentar ser lo que no es.
4Mas la mente es mente, tanto si está despierta como dormida. 5No es lo opuesto a nada que ella misma
haya creado, ni a lo que parece hacer mientras cree estar dormida.
8. Dios sólo crea mentes despiertas. 2Él no duerme, y Sus creaciones no pueden poseer algo que Él no les
confiera, ni dar lugar a condiciones que Él no comparte con ellas. 3El pensamiento de muerte no es lo
opuesto a los pensamientos de vida. 4Libres para siempre de toda oposición, los Pensamientos de Dios
son eternamente inmutables, y tienen el poder de extenderse inmutablemente para siempre, aunque
dentro de sí mismos, pues son omnipresentes.
9. Lo que parece ser lo opuesto a la vida es meramente un sueño. 2Cuando la mente elige ser lo que no es
y asumir un poder que le es ajeno y que no posee, un estado foráneo al que no puede adaptarse o una
condición falsa que no forma parte de su Fuente, simplemente parece que se va a dormir por un rato. 3Y
sueña al tiempo: un intervalo en el que lo que parece acontecer en realidad nunca ha sucedido, los
cambios ocurridos carecen de fundamento y los acontecimientos que parecen tener lugar no están en
ninguna parte. 4Cuando la mente despierta, sencillamente continúa siendo como siempre fue.
10. Seamos hoy criaturas de la verdad, y no neguemos nuestro santo patrimonio. 2Nuestra vida no es
como nos la imaginamos. 3¿Quién podría cambiar la vida sólo porque cierre los ojos, o porque haga de sí
mismo lo que no es al estar dormido y ver en sueños algo opuesto a lo que él es? 4 Hoy no pediremos la
muerte en ninguna de sus formas. 5Tampoco dejaremos que ni siquiera por un instante cosas imaginarias
que aparentemente se oponen a la vida moren allí donde Dios Mismo estableció el Pensamiento de vida
eterna.
11. Hoy procuraremos mantener su santo hogar tal como Él lo estableció y como Su Voluntad dispone que
sea eternamente. 2Él es Dueño y Señor de lo que hoy pensamos. 3Y en Sus Pensamientos, que no tienen
opuesto, entenderemos que sólo hay una vida, y ésa es la vida que compartimos con Él, con toda la
creación, así como con sus pensamientos, los cuales Él creó como una unidad de vida que no puede
separarse con la muerte ni abandonar la Fuente de vida de donde provino.
12. Compartimos una sola vida porque tenemos una sola Fuente desde la que nos llega la perfección, la
cual permanece por siempre en las santas mentes que Él creó perfectas. 2Somos ahora tal como siempre
hemos sido y como seremos siempre. 3La mente que duerme no puede sino despertar, según ve su propia
perfección reflejando al Señor de la Vida tan perfectamente que se funde con lo que allí se ve reflejado. 4Y
ahora ya no es un simple reflejo, 5
sino que se convierte en aquello que refleja y en la luz que hace que el
reflejo sea posible. 6La visión deja ahora de ser necesaria. 7Pues una mente despierta es aquella que
conoce su Fuente, su Ser y su Santidad.

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https://youtu.be/qceAKpDlitk

 

LECCION 168 UCDM

Tu gracia me es dada. La reclamo ahora.
1. Dios nos habla. 2¿No deberíamos nosotros acaso hablarle a Él? 3Dios no es algo distante. 4No trata de
ocultarse de nosotros. 5Somos nosotros los que tratamos de ocultarnos de Él, y somos víctimas del
engaño. 6Él siempre está enteramente accesible. 7Él ama a su Hijo. 8De nada, excepto de esto se puede
estar seguro, pero con eso basta. 9Él amará a su Hijo eternamente. 10Aun cuando su mente duerme, Él lo
ama. 11Y cuando su mente despierte, Él lo seguirá amando con un Amor que jamás ha de cambiar.
2. Si supieras el significado de Su Amor, tanto la esperanza como la desesperación serían imposibles.
2Pues toda esperanza quedaría colmada para siempre y cualquier clase de desesperación sería
inconcebible. 3Su gracia es Su respuesta para toda desesperación, pues en ella radica el recuerdo de Su
Amor. 4¿Cómo no iba Él a proporcionar gustosamente los medios a través de los cuales puede
reconocerse Su Voluntad? 5Su gracia es tuya sólo con que la reconozcas. 6Y Su memoria despertará en la
mente que le pida los medios a través de los cuales su sueño termina.
3. Hoy le pedimos a Dios el regalo que con más celo ha conservado dentro de nuestros corazones, en
espera de que se le reconozca. 2Se trata del regalo mediante el cual Dios se inclina hasta nosotros y nos
eleva, dando así Él Mismo el último paso de la salvación. 3Todos los pasos, excepto éste, los aprendemos
siguiendo las instrucciones de Su Voz. 4Pero al final es Él Mismo Quien viene, y tomándonos en Sus
Brazos hace que todas las telarañas de nuestro sueño desaparezcan. 5Su regalo de gracia es algo más
que una simple respuesta, 6pues restaura todas las memorias que la mente que duerme había olvidado y
toda la certeza acerca del significado del Amor.
4. Dios ama a Su Hijo. 2Pídele ahora que te proporcione los medios a través de los cuales este mundo
desaparece, y primero vendrá la visión, y un instante más tarde, el conocimiento. 3Pues en la gracia ves
una luz envolver al mundo con amor, y al miedo borrarse de todos los semblantes conforme los corazones
se alzan y reclaman la luz como suya. 4¿Qué queda ahora que pueda demorar al Cielo un sólo instante
más? 5¿Qué queda aún por hacer cuando tu perdón descansa sobre todas las cosas?
5. Hoy es un día nuevo y santo, pues recibimos lo que se nos ha dado. 2Nuestra fe radica en el Dador, no en
nuestra aceptación. 3Reconocemos nuestros errores, pero Aquel que no sabe de errores es Quien ha de
responder a ellos, proporcionándonos los medios con los que podemos dejarlos atrás y elevarnos hasta Él
con gratitud y amor.
6. Y Él desciende para recibirnos, según nosotros nos acercamos a Él. 2Pues lo que Él nos ha preparado, Él
lo da y nosotros lo recibimos. 3Tal es Su Voluntad, pues Él ama a Su Hijo. 4A Él elevamos nuestras oraciones
hoy, devolviéndole tan sólo la palabra que Él nos dio a través de Su Propia Voz, Su Palabra, Su Amor:
5Tu gracia me es dada. 6La reclamo ahora. 7Padre, vengo a Ti. 8Y Tú vendrás a mí que te lo pido, 9pues soy el
Hijo que Tú amas.

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https://youtu.be/vc8RbK9YoNU

 

LECCION 169 UCDM

Por la gracia vivo. Por la gracia soy liberado.
1. La gracia es el atributo del Amor de Dios que más se asemeja al estado que prevalece en la unidad de la
verdad. 2Es la aspiración más elevada que se puede tener en el mundo, pues conduce más allá de él. 3Se
encuentra más allá del aprendizaje, aunque es su objetivo, pues la gracia no puede arribar hasta que la
mente no se haya preparado a sí misma para aceptarla de verdad. 4La gracia se vuelve inevitable para
aquellos que han preparado un altar donde ésta pueda ser dulcemente depositada y gustosamente recibida:
un altar inmaculado y santo para este don.
2. La gracia es la aceptación del amor de Dios en un mundo de aparente odio y miedo. 2Sólo mediante la
gracia pueden desaparecer el odio y el miedo, pues la gracia da lugar a un estado tan opuesto a todo lo que
el mundo ofrece, que aquellos cuyas mentes están iluminadas por el don de la gracia no pueden creer que el
mundo del miedo sea real.
3. La gracia no es algo que se aprende. 2EI último paso tiene que ir más allá de todo aprendizaje. 3La gracia
no es la meta que este curso aspira a alcanzar. 4No obstante, nos preparamos para ella en el sentido de que
una mente receptiva puede oír la Llamada a despertar. 5Dicha mente no se ha cerrado completamente a la
Voz de Dios. 6Se ha dado cuenta de que hay cosas que no sabe, y, por lo tanto, está lista para aceptar un
estado completamente diferente de la experiencia con la que se siente a gusto por resultarle familiar.
4. Tal vez parezca que estamos contradiciendo nuestra afirmación de que el momento en que la revelación
de que el Padre y el Hijo son uno ya se ha fijado. 2Pero hemos dicho también que la mente es la que
determina cuándo ha de ocurrir ese momento, y que ya lo ha hecho. 3Te exhortamos, no obstante, a que des
testimonio de la Palabra de Dios para hacer que la experiencia de la verdad llegue más pronto y para
acelerar su advenimiento a toda mente que reconozca los efectos de la verdad en ti.
5. La unidad es simplemente la idea de que Dios es. 2Y en Su Ser, Él abarca todas las cosas. 3Ninguna
mente contiene nada que no sea Él. 4Decimos "Dios es"; y luego guardamos silencio, pues en ese
conocimiento las palabras carecen de sentido. 5No hay labios que las puedan pronunciar, ni ninguna parte
128de la mente es lo suficientemente diferente del resto como para poder sentir que ahora es consciente de
algo que no sea ella misma. 6Se ha unido a su Fuente, 7
y al igual que ella, simplemente es.
6. No podemos hablar, escribir, ni pensar en esto en absoluto. 2Pues aflorará en toda mente cuando el
reconocimiento de que su voluntad es la de Dios se haya dado y recibido por completo. 3Ello hace que la
mente retorne al eterno presente, donde el pasado y el futuro son inconcebibles. 4El eterno presente yace
más allá de la salvación; más allá de todo pensamiento de tiempo, de perdón y de la santa faz de Cristo.
5El Hijo de Dios simplemente ha desaparecido en su Padre, tal como su Padre ha desaparecido en él. 6El
mundo jamás ha tenido lugar. 7La eternidad permanece como un estado constante.
7. Esto está más allá de la experiencia que estamos tratando de acelerar. 2No obstante, cuando se
enseña y se aprende lo que es el perdón, ello trae consigo experiencias que dan testimonio de que el
momento en que la mente misma decidió abandonarlo todo excepto esto, está por llegar. 3No es que
realmente lo podamos acelerar, toda vez que lo que vas a ofrecer es algo que simple mente se había
ocultado de Aquel que enseña el significado del perdón.
8. Todo aprendizaje ya se encontraba en Su Mente, consumado y completo. 2Él reconoció todo lo que el
tiempo encierra, y se lo dio a todas las mentes para que cada una de ellas pudiera determinar, desde una
perspectiva en la que el tiempo ha terminado, cuándo ha de ser liberada para la revelación y la eternidad.
3Hemos repetido en varias ocasiones que no haces sino emprender una jornada que ya concluyó.
9. Pues la unidad no puede sino encontrarse aquí. 2Sea cual sea el momento que la mente haya fijado
para la revelación ello es completamente irrelevante para lo que no puede sino ser un estado constante,
eternamente como siempre ha sido, y como ha de seguir siendo eternamente. 3Nosotros simplemente
asumimos el papel que se nos asignó hace mucho, y que Aquel que escribió el guión de la salvación en el
Nombre de Su Creador y en el Nombre del Hijo de Su Creador, reconoció como perfectamente realizado.
10. No hay necesidad de clarificar más lo que nadie en el mundo puede entender. 2Cuando la revelación
de tu unidad tenga lugar, lo sabrás y lo comprenderás plenamente. 3Pero por ahora es mucho lo que aún
nos queda por hacer, pues aquellos que se encuentran en el tiempo pueden hablar de cosas que están
más allá de él, y escuchar palabras que explican que lo que ha de venir ha pasado ya. 4Mas ¿qué
significado pueden tener dichas palabras para los que todavía se rigen por el reloj, y se levantan, trabajan
y se van a dormir de acuerdo con él?
11. Baste, pues, con decir que para desempeñar tu papel es mucho lo que aún te queda por hacer. 2El
final seguirá siendo nebuloso hasta que hayas desempeñado por completo tu papel. 3Pero eso no importa,
4pues tu papel sigue siendo el pilar sobre lo que todo lo demás descansa. 5Conforme asumas el papel que
se te encomendó, la salvación se acercará un poco más a cada corazón incierto cuyo latir no esté aún en
sintonía con Dios.
12. El perdón es el eje central de la salvación, pues hace que todos sus aspectos tengan una relación
significativa entre sí, dirige su trayectoria y asegura su resultado. 2Y ahora pedimos que se nos conceda la
gracia, el último regalo que la salvación puede otorgar. 3La experiencia que la gracia proporciona es
temporal, pues la gracia es un preludio del Cielo, pero sólo reemplaza a la idea de tiempo por un breve
lapso.
13. Mas ese lapso es suficiente. 2Pues ahí es donde se depositan los milagros, que tú has de devolver de
los instantes santos que recibes a través de la gracia que experimentas, a todos los que ven la luz que
aún refulge en tu faz. 3¿Qué es la faz de Cristo sino la de aquel que se adentró por un momento en la
intemporalidad y al volver trajo consigo -para bendecir al mundo- un claro reflejo de la unidad que
experimentó allí? 4¿Cómo podrías llegar a alcanzarla para siempre, mientras una parte de ti se encuentre
afuera, ignorante y dormida, necesitada de que tú des testimonio de la verdad?
14. Siéntete agradecido de poder regresar, de la misma manera en que te alegró ir por un instante, y
acepta los dones que la gracia te otorgó. 2Es a ti mismo a quien se los traes. 3Y la revelación no está muy
lejos. 4Su llegada es indudable. 5Pedimos que se nos conceda la gracia y la experiencia que procede de
ella. 6Damos la bienvenida a la liberación que les ofrece a todos. 7No estamos pidiendo lo que no se puede
pedir. 8No tenemos nuestras miras puestas en aquello que está más allá de lo que la gracia puede
conceder. 9Pues eso lo podemos dar con la gracia que se nos ha concedido.
15. Nuestro objetivo de aprendizaje de hoy no excede lo que expresa esta plegaria. 2Mas ¿qué puede
haber en el mundo que sobrepase lo que en este día le pedimos a Aquel que nos concede la gracia que
pedimos, tal como se le concedió a Él?
3Por la gracia vivo. 4Por la gracia soy liberado. 5Por la gracia doy. 6Por la gracia he de liberar.

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https://youtu.be/9DIE9bT-6j4

 

LECCION 170 UCDM

En Dios no hay crueldad ni en mí tampoco.
1. Nadie ataca sin la intención de herir. 2En esto no hay excepciones. 3Cuando piensas que atacas en
defensa propia estás afirmando que ser cruel te protege, que la crueldad te mantiene a salvo. 4Estás
afirmando que herir a otro te brinda libertad. 5Y estás afirmando también que atacar cambia el estado en
que te encuentras por otro mejor, más seguro, donde estás más a salvo de los asaltos del peligro y del
temor.
1292. ¡Qué descabellada es la idea de que atacando es la manera de defenderse del miedo! 2Pues he aquí
donde se engendra el miedo y se le nutre de sangre para que crezca, se expanda y sea cada vez más
rabioso. 3Ésta es la manera de proteger el miedo, no de escaparse de él. 4Hoy aprendemos una lección
que te evitará más demoras y sufrimientos de los que te puedes imaginar. 5Y es ésta:
6Tú fabricas aquello de lo que te defiendes. aY al defenderte contra ello haces que
sea real e ineludible. 7Depón tus armas, y sólo entonces percibirás su falsedad.
3. Parece ser un enemigo externo a quien atacas. 2Sin embargo, al defenderte forjas un enemigo interno;
un pensamiento extraño que está en guerra contigo, que te priva de paz y divide tu mente en dos bandos
que parecen ser totalmente irreconciliables. 3Pues ahora el amor tiene un "enemigo", un opuesto; y el
miedo, el extraño, necesita que lo defiendas contra la amenaza de lo que realmente eres.
4. Si examinases detenidamente los medios por los que tu ilusoria defensa propia procede a lo largo de su
curso imaginario, te percatarías de las premisas sobre las que se basa la idea. 2En primer lugar, es obvio
que las ideas tienen que abandonar su fuente, pues eres tú quien lanza el ataque y quien tuvo que haberlo
concebido primero. 3No obstante, lanzas el ataque contra algo externo a ti y en tu mente te separas de
aquel a quien atacas, completamente convencido de que la división a la que has dado lugar es real.
5. En segundo lugar, los atributos del amor se le confieren a su "enemigo". 2 Pues el miedo se convierte en
tu refugio y en el protector de tu paz, y recurres a él en busca de solaz y de escape de cualquier duda con
respecto a tu fortaleza, así como con la esperanza de poder descansar en una quietud sin sueños. 3Y al
así despojar al amor de lo que le pertenece a él y sólo a él, se le dota con los atributos del miedo. 4Pues el
amor te pediría que depusieses todas tus defensas por ser éstas meras necedades. 5Y ciertamente tus
armas se desmoronarían y quedarían reducidas a polvo, 6pues eso es lo que son.
6. Al tener al amor como enemigo, la crueldad se convierte necesariamente en un dios. 2Y los dioses
exigen que sus seguidores obedezcan sus mandatos sin rechistar. 3A aquellos que cuestionan la sensatez
o cuando menos la cordura de tales exigencias, se les castiga severa e implacablemente. 4Pues son sus
enemigos los que son irrazonables y dementes, mientras que ellos son siempre justos y misericordiosos.
7. Hoy examinaremos friamente a este dios cruel. 2Y nos daremos cuenta de que aunque sus labios están
manchados de sangre y de que de su boca parecen salir llamas, está hecho de piedra. 3No puede hacer
nada. 4No tenemos que desafiar su poder, 5pues no tiene ninguno. 6Y quienes ven en él su seguridad, no
tienen ni guardián ni fortaleza a los que invocar en caso de peligro, ni ningún poderoso guerrero que salga
en su defensa.
8. Este momento puede ser terrible. 2Pero también puede ser el momento en que te emancipas de tu
abyecta esclavitud. 3Pues al estar frente a este ídolo y verlo exactamente como es, llevas a cabo una
elección. 4¿Vas a restituirle al amor lo que has procurado arrebatarle para ponerlo a los pies de ese
inanimado bloque de piedra? 5¿O vas a inventar otro ídolo para que lo reemplace? 6Pues el dios de la
crueldad adopta muchas formas. 7Siempre es posible encontrar otra.
9. Mas no creas que el miedo es la manera de escapar del miedo. 2Recordemos lo que se ha subrayado
en el texto con respecto a los obstáculos que la paz tiene que superar. 3De éstos, el último, el más difícil
de creer que en realidad no es nada, si bien aparenta ser un bloque sólido, impenetrable, temible e
insuperable, es el miedo a Dios Mismo. 4He aquí la premisa básica que entrona como un dios al
pensamiento del miedo. 5Pues el miedo es venerado por aquellos que le rinden culto, y el amor parece
ahora estar revestido de crueldad.
10. ¿De dónde ha surgido la creencia tan irracional de que hay dioses de venganza? 2El amor no ha
confundido sus atributos con los del miedo. 3Mas los que le rinden culto al miedo perciben su propia
confusión en el "enemigo" del miedo, y la crueldad de éste como parte del amor. 4¿Y qué podría ser ahora
más temible que el Corazón del Amor Mismo? 5Sus labios parecen estar manchados de sangre y de su
boca parece brotar fuego. 6Pero sobre todo, Él es terrible e increíblemente cruel, y siega las vidas de todos
aquellos que lo consideran su Dios.
11. No hay duda acerca de la elección que hoy has de llevar a cabo. 2Pues hoy posarás tu mirada por
última vez sobre ese bloque de piedra que tú mismo esculpiste, y dejarás de llamarle dios. 3Has llegado
hasta este punto antes, pero has elegido que ese dios cruel permanezca contigo en otra forma. 4Y por eso
el temor a Dios volvió a apoderarse de ti. 5Pero esta vez lo dejarás allí. 6Y al volver regresarás a un mundo
nuevo, aliviado de ese peso; un mundo que no se ve a través de sus ojos ciegos, sino a través de la visión
que te ha sido restituida gracias a tu elección.
12. Ahora tus ojos le pertenecen a Cristo y es Él quien mira a través de ellos. 2Ahora tu voz le pertenece a
Dios y se hace eco de la Suya. 3Ahora tu corazón permanecerá en paz para siempre. 4Lo has elegido a Él
en lugar de los ídolos, y los atributos con los que tu Creador te bendijo te son por fin restituidos. 5La
Llamada a Dios ha sido oída y contestada. 6Ahora el miedo ha dado paso al amor, al Dios Mismo
reemplazar la crueldad.
13. Padre, somos como Tú. 2En nosotros no hay crueldad, puesto que en Ti no la hay. 3Tu paz es
nuestra. 4Y bendecimos al mundo con lo que hemos recibido exclusivamente de Ti. 5Elegimos una vez
más, y elegimos asimismo por todos nuestros hermanos, sabiendo que son uno con nosotros. 6Les
brindamos Tu salvación tal como la hemos recibido ahora. 7Y damos gracias por ellos que nos
130completan. 8En ellos vemos Tu gloria y en ellos hallamos nuestra paz. 9Somos santos porque Tu
santidad nos ha liberado. 10Y Te damos gracias por ello. 11Amén.

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https://youtu.be/T3CDQcyAYuQ

 

LECCION 171 UCDM

Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
1. (151) Todas las cosas son ecos de la Voz que habla por Dios.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
2. (152) Tengo el poder de decidir.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.

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https://youtu.be/DXrjabhMnIc

 

LECCION 172 UCDM

Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
1. (153) En mi indefensión radica mi seguridad.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
2. (154) Me cuento entre los ministros de Dios.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.

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https://youtu.be/Gc-5duxXqZ8

 

LECCION 173 UCDM

Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
1. (155) Me haré a un lado y dejaré que Él me muestre el camino.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
2. (156) Camino con Dios en perfecta santidad.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.

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https://youtu.be/mVHcFDEFAII

 

LECCION 174 UCDM

Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
1. (157) En Su Presencia he de estar ahora.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
2. (158) Hoy aprendo a dar tal como recibo.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.

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https://youtu.be/gon2fwy6swA

 

LECCION 175 UCDM

Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
1. (159) Doy los milagros que he recibido.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
2. (160) Yo estoy en mi hogar.
1322El miedo es el que es el extraño aquí. 3Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.

VIDEO

https://youtu.be/6d537ixIaFk

 

LECCION 176 UCDM

Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
1. (161) Dame tu bendición, santo Hijo de Dios.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
2. (162) Soy tal como Dios me creó.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.

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https://youtu.be/bt_b_Q6g9IY

 

LECCION 177 UCDM

Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
1. (163) La muerte no existe. 2El Hijo de Dios es libre.
3Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
2. (164) Ahora somos uno con Aquel que es nuestra Fuente.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.

VIDEO

https://youtu.be/QPmCOpp7OCM

 

LECCION 178 UCDM

Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
1. (165) Que mi mente no niegue el Pensamiento de Dios.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
2. (166) Se me han confiado los dones de Dios.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.

VIDEO

https://youtu.be/v3ERCdZ7YNA

 

LECCION 179 UCDM

Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
1. (167) Sólo hay una vida, y ésa es la vida que comparto con Dios.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
2. (168) Tu gracia me es dada. 2La reclamo ahora.
3Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.

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https://youtu.be/lDbjwZR5MXQ

 

LECCION 180 UCDM

Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
1. (169) Por la gracia vivo. 2Por la gracia soy liberado.
3Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.
2. (170) En Dios no hay crueldad ni en mí tampoco.
2Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.

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https://youtu.be/Vwbf8W-PMbY

 

 

 

 

 

Informes:

(521) 33-15-66-25-66

Lic. Leticia Gonzalez Hernández Maestría en desarrollo humano.

 

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